El litigio entre la plantilla de B&W y la SEPI se atasca en la Audiencia
El conflicto entre los trabajadores de Babcock Wilcox y la SEPI se ha atascado en la Audiencia Nacional. La Sala de lo Social suspendió ayer el juicio previsto para dictaminar sobre las pretensiones de la plantilla del fabricante de bienes de equipo, que había solicitado su reincorporación al grupo público.
El enésimo capitulo judicial con Babcock Wilcox como protagonista está todavía por rodarse al incorporarse nuevos actores al escenario procesal. La Sala de lo Social de la Audiencia Nacional decidió ayer suspender el juicio en el que se enfrentaban la SEPI y Babcock Wilcox, su filial al 100%, con los 440 trabajadores del grupo vizcaíno, que habían solicitado su reincorporación a la empresa tras su salida de la órbita pública.
La decisión se fundamenta en que en el Juzgado de Instrucción número seis de lo Penal de la Audiencia Nacional, dirigido por Juan del Olmo, ha admitido una querella de varios trabajadores de la antigua B&W en la que denunciaban presuntas irregularidades en el proceso de privatización abierto en el año 2001. La querella incluye desde los gestores de la SEPI a los adjudicatarios, el grupo alemán Babcock Power en primera instancia y hasta su suspensión de pagos, y a Austrian Energy su actual propietario. Este proceso abierto ha aconsejado a la Sala de lo Social suspender el juicio hasta que del Olmo se pronuncie en sentencia o le traslade un informe prejudicial sobre la incidencia que un eventual auto pueda tener en su resolución.
Venta de activos
El enredo judicial se produce apenas dos meses antes de que Austrian Energy se libere de los compromisos contractuales con la SEPI que le impedían vender activos de Babcock. El grupo público tiene todavía retenidos 27 millones de euros que debería entregar a Austrian Energy porque la firma austriaca no ha cumplido con sus compromisos de inversión.