Auge de monetarios dinámicos
Estos fondos permiten obtener más ganancias que los tradicionales, pero con más riesgo
Se les puede calificar como la opción estrella dentro del mercado de fondos de inversión español si nos atenemos a su popularidad con los inversores. Su éxito no se circunscribe sólo al mercado nacional sino que los inversores europeos en general han mostrado su apetito por este producto. Francia, con gestoras como Crédit Agricole a la cabeza, se establece como pionero y líder en la gestión de estos fondos.
Los informes pan europeos de Lipper sobre flujos de patrimonios ponen de manifiesto cómo esta categoría de fondos ha pasado de tener un peso reducido en términos de activos gestionados y suscripciones, a situarse entre las posiciones más destacadas. El comienzo de la segunda mitad del año pasado supuso el definitivo despegue de estos fondos en cuanto a su capacidad para atraer el dinero de los inversores. Así, ha habido numerosos meses donde las suscripciones netas han alcanzado varios miles de millones de euros en el conjunto europeo.
Concretamente, en los meses de marzo y abril de este año las suscripciones netas rondaron los 4.000 millones de euros, situándose en este primer caso en los más alto del ranking de categorías, por encima incluso de los fondos monetarios tradicionales o los de renta variable europea. Tras la corrección de los mercados bursátiles de mayo y junio pasados no han vuelto a alcanzar cifras tan elevadas pero todavía en los últimos meses de agosto y septiembre consiguieron unas entradas netas nada despreciables de 1.000 millones.
La última corrección bursátil a la que hacemos referencia arriba ha tenido un efecto negativo en la rentabilidad de estos fondos, lo que ha supuesto una sorpresa para no pocos partícipes, que entendían este producto como una alternativa a los monetarios tradicionales. Precisamente aquí se encuentra la principal razón de su éxito: en un entorno de bajos tipos de interés los fondos monetarios tradicionales no alcanzan siquiera el 2% de rentabilidad, lo que en un país como España con elevada inflación, significa incapacidad para mantener el poder adquisitivo de los ahorros. Los fondos monetarios tradicionales se han comercializado en no pocas ocasiones como la solución a este problema tan común del inversor español sin incurrir en riesgos.
La realidad es que los monetarios dinámicos tampoco pueden escapar a la dictadura del binomio rentabilidad frente a riesgo que afecta a cualquier inversión. La obtención de rentabilidades similares o superiores a los tipos de interés a corto plazo implica incurrir en algún riesgo, por lo que determinadas pérdidas temporales son difíciles de evitar. Así, los fondos monetarios dinámicos, en su búsqueda de ese extra de rentabilidad sobre los monetarios tradicionales, se exponen a Bolsa, curva de tipos, mercados de crédito, tipos de cambio, etc.
Una mayoría de gestoras gestionan estos fondos a través de la inversión en otros fondos con los que buscan una amplia diversificación y un elevado control del riesgo. Lipper registra en su base de datos cerca de 100 fondos registrados a la venta en España pertenecientes a esta categoría, de los que más de tres cuartas partes son fondos de fondos. Dentro de estos la mayoría son fondos de fondos externos, es decir, invierten en fondos no pertenecientes a la propia gestora.
Un análisis rápido del comportamiento de estos fondos revela que más o menos han conseguido cumplir el objetivo de proporcionar una rentabilidad superior a los monetarios tradicionales u otra opción como pueden ser los fondos de renta fija en euros a corto plazo. De esta manera, la rentabilidad media de los fondos autorizados a la venta en España en los tres últimos años ha sido cercana al 5,6% y del 2,1% en los doce últimos meses, lo que supera ligeramente a las otras dos opciones. No obstante, las diferencias son bastante reducidas y ello en un entorno que en términos generales ha sido claramente favorable para la toma de riesgos como puedan ser los de Bolsa o crédito por ejemplo. Reflexionamos sobre este punto en el comentario junto al gráfico central.
Finalmente, me gustaría destacar cómo el comportamiento de los fondos comercializados en España muestra peor cara que el conjunto de los fondos europeos. El índice Lipper de la categoría, que agrupa a todos los fondos europeos, registra unas ganancias del 7,01% y del 2,51% en los tres y el último año, claramente superior a los registros más arriba indicados.
Análisis. La prueba de la caída de la Bolsa
Los fondos monetarios dinámicos podrían referirse como de gestión alternativa de muy bajo riesgo ya que buscan retornos positivos moderados absolutos con una volatilidad muy reducida.El momento donde más se ponen a prueba este tipo de fondos es durante periodos donde la Bolsa es bajista y los mercados son complicados en general.