Abrir a la competencia los correos de la Unión Europea
La Comisión Europea desvelará esta semana su última propuesta para abrir el sistema de correos a la competencia a partir de 2009 -y se encontrará con una fuerte hostilidad de algunos países miembros, como Francia (...)-. El mercado parece un monopolio natural clásico. Por ejemplo, sería un derroche duplicar el sistema de recogida y distribución. Pero los cambios en el mercado y las mejoras en la logística justifican la competencia y la UE debe asegurar que la liberalización se efectúe siguiendo su calendario, y debe impedir que los países miembros usen la obligación del servicio universal como excusa para el proteccionismo.
El sector, que emplea ya a más de cinco millones de personas, ha sido tradicionalmente dominado por los monopolios estatales. En 1997 se introdujo algo de competencia, pero crucialmente no para el correo que pesa menos de 50 gramos, lo que constituye la mayoría del correo enviado (...).
Como ocurrió en anteriores esfuerzos de liberalización, el problema estará en el detalle. Ni los intereses de los consumidores ni la salud a largo plazo del mercado pueden ser sacrificados a favor de beneficios políticos a corto plazo. El mercado de los servicios postales tiene algunas características únicas, pero ninguna justifica políticas proteccionistas (...).