LSE se blinda en caso de opa
El Gobierno teme que las empresas británicas deban someterse a la ley estadounidense
El Gobierno británico planea prevenir que cualquier compañía que compre London Stock Exchange (LSE), el operador de los mercados británicos, importe al mercado las reglas que afectan a las compañías del país de procedencia del comprador. El Reino Unido pretende así blindarse en caso de que triunfen los repetidos intentos del mercado estadounidense Nasdaq por hacerse con LSE.
Lo que temen las autoridades es que una fusión entre ambas compañías obligue a las empresas británicas a someterse a la ley Sarbanes-Oxley, que ha endurecido la normativa contable para las empresas estadounidenses tras los escándalos ocurridos en el año 2001.
'El régimen Sarbanes-Oxley de Estados Unidos no es un régimen con el que algunas compañías se sientan cómodas', señaló ayer desde Hong Kong el secretario del Tesoro británico Ed Balls. 'Si se produjera un cambio de propiedad, con el tiempo se podría producir la importación de reglas de otros países al Reino Unido'.
Nasdaq lanzó este año una opa sobre LSE, que el mercado británico rechazó. La plataforma estadounidense ha adquirido un 25,1% de LSE. Según la normativa británica, Nasdaq podrá volver a lanzar una oferta sobre el mercado inglés a finales del mes de septiembre.