Shortes ofrece herramientas para el bienestar
Ayudar a la gente con discapacidad a través de productos ortopédicos y de rehabilitación es el objetivo de esta empresa asturiana. Con una apuesta decidida por la I+D, a la que dedica un 10% de las ventas, el grupo factura cuatro millones al año y dedica el 20% de la producción a la exportación. En sus veinte años de existencia, 41 países de todo el mundo han adquirido ya sus productos
La historia de Shortes España está íntimamente ligada a la experiencia vital de su presidente, Ángel Yuste. Ingeniero técnico naval, Yuste vivió la primera crisis del sector naval español en los años sesenta, cuando trabajaba en los astilleros de Cádiz. En los setenta, este andaluz, procedente de la localidad de Jerez de la Frontera, se traslada a Asturias para trabajar en una filial del grupo Astilleros Españoles, y es en 1982 cuando se topa con la segunda crisis naval que, esta vez sí, le toca de lleno. Le ofrecen dinero para marcharse y decide aceptar la propuesta.
Anteriormente, en 1970, había sufrido un accidente cuando estaba en el lugar de trabajo, a consecuencia del cual pierde los dedos de un pie. En ese momento, conoce a un doctor austriaco radicado en Gijón para el que sirve como conejillo de indias por un periodo de doce años. 'Siempre que venían alemanes con materiales ortopédicos y de rehabilitación me avisaba y yo me prestaba a probarlos. Me llamaba la atención el hecho de que todos esos productos no existían en España y tenían que importarse', recuerda Yuste.
Es entonces cuando se ve obligado a dejar los astilleros, con más de cuarenta años y tres hijos. 'Ante el dilema de ser uno de los muchos prejubilados de Asturias y verme dando vueltas por el Muro de San Lorenzo, me acordé del déficit que había en España en la producción de esos materiales que yo probaba y decidí ir a Alemania para comprobar cómo era esta industria. Al final, me di cuenta de que lo que hacían los alemanes también podríamos hacerlo nosotros'.
Y dicho y hecho. En 1982 fundó una empresa que, cuatro años después, da lugar a Shortes España, compañía dedicada a fabricar productos ortopédicos, para rehabilitación, suministros hospitalarios, terapia ocupacional, estética y salud. Algunos de estos productos para personas con discapacidad son, por ejemplo, sillas manuales, de ruedas, arnés de grúas para techo, etcétera.
Tomada la decisión, se plantea un objetivo empresarial ambicioso: vender productos de ortopedia a los propios alemanes. 'Esa utopía se cumplió a los tres años. Nos presentamos por primera vez en la ciudad de Essen a un certamen internacional de prestigio y conseguimos un pedido de una empresa alemana por más de 90 millones de pesetas de la época'.
La apuesta por mercados ya consolidados desde el principio puede calificarse de osadía. 'Me di cuenta de que, para avanzar rápido, no debía ir por la estrategia típica de la empresa española, que es acudir a los mercados de los países subdesarrollados, sino que debíamos vender en los países avanzados, con el fin de conseguir una credencial muy fuerte que me permitiese vender en el resto de naciones', afirma Ángel Yuste.
Tras veinte años de existencia, el grupo factura al año unos cuatro millones de euros, cuenta con 26 empleados y, a lo largo de este tiempo, ha colocado sus productos en 41 países. Los clientes de Shortes no son particulares, sino lo que José Luis Solar, empleado de Hortyarte, un centro especial que trabaja sólo para esta empresa, denomina la ortopedia. Es decir, empresas privadas a las que acude el usuario pidiendo, por ejemplo, una silla de ruedas con unas características determinadas. 'Adaptamos el producto a las necesidades del usuario. Incluso modificamos sillas de la competencia y reparamos'.
La principal base de desarrollo de la empresa, según su presidente, es la I+D+i. 'Fuimos de los primeros en aplicar este apartado. La duración de los productos la determinamos nosotros y no el mercado. Llegado el momento, o buscamos un desarrollo más avanzado del mismo o bien lo retiramos. Para esta labor, la compañía ha contado con la ayuda del Programa Profit, del Fycit, de los fondos Feder o del CDTI, entre otros'. Con este último organismo ha trabajado en dos proyectos: desarrollo, por un lado, de sillas de ruedas avanzadas, y, por otro, de productos basados en nuevos materiales poliméricos para la prevención de úlceras por presión.
'Nuestro mercado de discapacitados es muy reducido, nos dirigimos sólo a un 5% de la población, por eso buscamos nuevos nichos de negocio. El futuro consiste en el desarrollo de líneas de ayudas para el baño, pensadas para personas mayores o con problemas de reumatismo, o la comercialización de aparatos, como un dispositivo-dispensador automático de jabón', explica Yuste.
Exportación. Un desafío superado desde el inicio
En la actualidad, Shortes España tiene distribuidores en Reino Unido, Portugal, República Checa, Hungría y Grecia y fabrica en países como Alemania, Estados Unidos, China, Taiwán o Paraguay. El último pedido de Hungría asciende a cien unidades de sillas, pero la pretensión es introducir en este mercado soportes ortopédicos que, en estos momentos, están en fase de evaluación para que puedan incorporarse a las prestaciones de la seguridad social de este país. También, por ejemplo, ha exportado 900 sillas de ruedas manuales a Irak mediante un programa de la Cruz Roja.'Antes de la entrada en la UE vendíamos bastante en Europa; después, la situación ha cambiado bastante. Existen muchas barreras técnicas en numerosos países..., menos en España. Aunque se hable de mercado único europeo, es una falacia', protesta Yuste. El presidente de Shortes resalta que los avances que aplican a los productos llegan a España más tarde que a otros países europeos. 'Llevamos trabajando con las grúas de techo unos doce años, pero es ahora cuando las empresas empiezan a introducir este producto en sus catálogos'.Yuste expone que hay productos como los andadores de ruedas con cesto y asiento que son muy utilizados en los países nórdicos, pero que en España, en cambio, a los clientes les da vergüenza usarlos.
Datos
Internacional. La compañía dedica un 20% de la producción a la exportación, quedando el resto para el mercado nacional.I+D. En el departamento de investigación y desarrollo trabajan seis personas. A este apartado, Shortes destina el 10% de su facturación.Distribución. La empresa es diseñadora y mayorista, pero también cuenta con distribución al por menor. En concreto, tiene tres tiendas, situadas en Asturias, que venden directamente al público.