El accidente de Palencia se debió a un exceso de velocidad del tren

A la espera de conocer los resultados definitivos de las investigaciones para esclarecer las causas que provocaron el lunes el descarrilamiento de un tren en la localidad palentina de Villada, todo apunta a que el exceso de velocidad del convoy fue el detonante de la tragedia en la que murieron seis personas y otras 36 resultaron heridas.

A las declaraciones de la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, achacando a la velocidad el accidente, se sumó el presidente de Renfe, José Salgueiro, que anunció que hoy miércoles se sabrá 'con exactitud' por qué el tren circulaba por encima de la velocidad debida y por qué no redujo cuando cambió de vía para dejar paso a un Talgo. Salgueiro admitió que el tren viajaba con algunos minutos de retraso, pero aclaró que esta circunstancia 'no es transcendente', porque ello no obliga al maquinista a superar la velocidad permitida.

Trece viajeros permanecían ayer ingresados en distintos hospitales de Castilla y León. De los afectados, cuatro se encuentran en estado grave y un joven sigue con pronóstico muy grave ingresado en el Hospital Clínico de Valladolid. Se trata de D.F.D., de 22 años, aquejado de un traumatismo craneoencefálico y torácico que se ha visto complicado por la aparición de un hematoma subdural. Por su parte, el tráfico en la línea férrea fue restablecido a primera hora de la tarde de ayer después de que concluyeran los trabajos de retirada de los restos del tren siniestrado.

Los comités de empresa de Adif y Renfe Operadora enviaron un mensaje de condolencia a los familiares de las víctimas. El sindicato Semaf, por otra parte, informó que el maquinista del tren superó las pruebas de alcholemia y drogas que le realizaron tras el accidente.