Recuperar el permiso cuesta 320 euros y aprobar un examen
La legislación española es menos punitiva que la del resto de Europa
El carné por puntos francés, basado en un saldo inicial de 12 puntos, nació en 1992. Su aplicación es tan estricta que los conductores pierden un punto si se les sorprende pisando una línea continua.
Una década antes había echado a rodar el británico, como en todo lo referente a la conducción, con sus peculiaridades. En este caso, los puntos se suman y una falta como conducir bebido supone la retirada del documento durante un año. En Alemania, por último, se implantó en 1999 y contempla la ayuda psicológica para quien alcanza los 18 puntos. De encontrarse ante un caso irreversible de conducta incívica al volante, se prohíbe la conducción al sujeto de por vida.
El modelo adaptado en España es más suave, pero aún así ofrece puntos para la polémica:
1. La Asociación de Automovilistas Europeos advierte que la legislación española no considera la pérdida de puntos como una sanción. De este modo resulta complicado recurrir.
2. Los conductores que suelen circular por ciudad pueden estar tranquilos: en la mayoría de los casos las multas por aparcamiento no restan. No penaliza abandonar el coche en zonas prohibidas, en doble fila, ni en zona verde o azul sin abonar la tarifa. Eso sí, se considera peligroso el estacionamiento en curvas, cambios de rasante, túneles o cruces. En todos estos supuestos bajaría el crédito del conductor. Ojo con usar el carril bus, los legisladores han hecho un guiño al transporte urbano y sancionan con dos puntos (cuatro en el caso del conductor novel) a quien lo utilice para dejar el coche.
3. Un total de 235 autoescuelas repartidas por todo el territorio español van a ser quienes reeduquen al mal conductor cuando le sean retirados los puntos. En muchos casos tendrán que desplazarse más de 30 kilómetros para asistir a las clases necesarias para recuperarlos. En todas las capitales de provincia hay al menos un centro, llamado de sensibilización y reeducación vial. Sus puertas abrirán gradualmente entre mañana (el 30%) y el 1 de enero de 2007.
4. Quienes tengan por costumbre saltarse las normas de tráfico sólo podrán realizar un curso cada dos años (uno al año en caso de los profesionales) en el que se pueden obtener un máximo de cuatro puntos. El precio de las 12 horas de formación obligatoria es de 170 euros. Cuando el permiso se ha perdido por completo habrá que afrontar 24 horas de clases y una factura de 320 euros. Al finalizar este refresco del Código de Circulación se pasa por Tráfico para afrontar un examen.
5. Los profesionales del volante que excedan un 50% el tiempo de conducción o reduzcan a la mitad el de descanso verán reducido su crédito en seis puntos.
6. La acumulación de infracciones como conductor en la vida privada puede dejar fuera de juego a los profesionales. Interior no diferencia en qué momento ni dónde se comete la falta.
7. El pago anticipado de una multa (en los 30 días naturales siguientes a la notificación) supone un 30% de descuento, pero los puntos restados permanecen inalterables.
8. Queda prohibido circular con menores de 12 años en el asiento delantero. Y los niños menores de tres no pueden viajar atrás a no ser que estén acomodados en sillas homologadas. La Agrupación General de Taxistas (Agetaxi) ya ha observado que los taxis no podrán transportar a estos niños menores de tres años por carecer, en la mayor parte de los casos, de sillas especiales.
9. Arrojar a la vía cualquier objeto, especialmente si puede ocasionar un incendio o un accidente, será tenido en cuenta como infracción grave y supone una sanción de 4 puntos.
10. No tener pasada la ITV (Inspección Técnica del Vehículo) será castigado con una multa de 91 a 300 euros y una posible suspensión del carné de 1 hasta 3 meses de plazo.