Amplia victoria del 'sí' en Cataluña con una participación del 49%
Cataluña tendrá al fin nuevo Estatuto. El 73,9% de los votantes dio ayer un amplio respaldo al texto, en una jornada marcada por la baja participación. Tres años de negociaciones tan sólo consiguieron animar al 49,42% de los ciudadanos con derecho a voto. Antes de la convocatoria, los partidos a favor del sí habían calificado de 'fracaso' una participación inferior al 60% en la convocatoria.
Miravet tomará el relevo a Sau. El nuevo Estatut echó ayer finalmente a andar con un apoyo del 73,9% de los votantes. Con un 99,65% de los votos escrutados, los partidarios del no alcanzaron el 20,76%, mientras que los que se decantaron por votar en blanco representaron el 5,34%. Los catalanes dieron el sí al nuevo texto en una jornada marcada por una baja participación, que se situó en el 49,42%. De los cinco referéndums celebrados en Cataluña desde la recuperación de la democracia (Constitución, Estatut de 1979, OTAN, Constitución Europa y el presente texto) esta es la segunda ocasión en la que la participación no ha alcanzado la mitad de los electores con derecho a voto. La reciente consulta de la Constitución europea celebrada en febrero de 2005 registró una participación del 40,9%.
El texto estatutario que ha estado vigente en los últimos 26 años, el de Sau, fue aprobado en 1979 con el 88,1% de síes y una participación del 59,7% del censo electoral. En aquella ocasión la convocatoria electoral se celebró en día laborable.
Los partidos políticos concedieron en sus valoraciones mayor o menor importancia a los datos de abstención en función de su alineación a favor del sí o del no. En todo caso, PSC e ICV (partidarios del sí) habían manifestado durante la campaña que una participación inferior al 60% sería considerada un 'fracaso'.
El consejero de Presidencia y portavoz del Gobierno, Joaquim Nadal, destacó en primer lugar el hecho de que 'Cataluña tuviera un nuevo Estatuto' y calificó el respaldo obtenido por parte de los votantes 'muy amplio'.
El primer secretario del PSC, José Montilla, definió los resultados de 'victoria clara y contundente derrota del no'. En este sentido, hizo referencia a que el PP 'había fracasado en su intento de que Cataluña no cuente con un instrumento más potente para hacer realidad un verdadero autogobierno'. El dirigente socialista no se pronunció en un primer momento sobre la baja participación registrada en la consulta. En una comparecencia posterior añadió que la cifra de participación no debía distraer de la consecución del objetivo que era la aprobación del Estatuto. En este sentido señaló el hecho de que el vigente estatuto gallego fue aprobado en una convocatoria en la que únicamente acudieron a las urnas el 28% de los gallegos con derecho a voto.
CiU, que junto con el PSC y ICV recomendaban el voto positivo, consideró el porcentajes de síes 'arrolladores', mientras que atribuía el bajo nivel de participación a, entre otros factores, 'la crisis institucional sin precedentes' del gobierno catalán. El presidente de CiU, Artur Mas, reconoció que 'nos hubiese gustado una participación superior, aunque la democracia es lo que es'.
El líder de ERC, Josep Lluís Carod Rovira, aceptó la plena validez del resultado: 'El no que nosotros defendíamos no ha ganado. Hemos tenido dificultad para hacer llegar nuestro mensaje porque otros partidos han planteado el referéndum en clave de un enfrentamiento entre Zapatero y Rajoy, y ya se sabe quién pierde cuando las cosas se plantean así en Cataluña'. Señaló que la alta abstención se ha producido porque muchos entendían el texto como una prórroga del Estatut del 79 y animó a reflexionar sobre este punto en los próximos días. ERC ha hecho campaña durante las últimas dos semanas por el voto negativo, lo que le propició su salida del gobierno tripartito con PSC e ICV. Joan Saura, líder de ICV, dijo que la falta de una propuesta unitaria de los partidos durante la campaña favoreció la abstención.
Una mejor financiación y mayor autogobierno
Una de las principales diferencias en cuanto a financiación entre el Estatuto de 1979 y el que se aprobó ayer es que el texto actual no queda subordinado a la Lofca (Ley Orgánica de Financiación de Comunidades Autónomas). Así, el nuevo Estatuto establece que las relaciones tributarias entre el Estado y la Generalitat 'se regulan por la Constitución, el Estatuto y la Lofca', en este orden.El texto aprobado queda pues muy lejos de las aspiraciones iniciales de los partidos políticos catalanes (la definición de Cataluña como nación, la gestión de todos los impuestos recaudados en Cataluña o la creación de una agencia tributaria propia) pero muchos expertos afirman que mejora considerablemente el modelo actual de financiación y el nivel de autogobierno. Otros expertos advierten que para una valoración definitiva habrá que esperar a ver con que criterios se regirá la solidaridad entre comunidades.La cesta de los impuestos cedidos parcialmente aumenta. El texto aprobado establece en las disposiciones adicionales 8, 9 y 10 que la Generalitat gestionará el 50% del IRPF y el IVA y el 58% de los impuestos especiales, frente a los actuales 33% de IRPF, 35% de IVA y 40% de los especiales. El texto de 1979 concedía a la Generalitat el 100% del impuesto de sucesiones y donaciones, patrimonio y transmisiones patrimoniales. La Lofca ha ampliado después los tributos cedidos totalmente a los impuestos sobre actos jurídicos documentados, electricidad, medios de transporte, juego y venta minorista de hidrocarburos.El texto establece que la Generalitat tendrá capacidad normativa sobre todos los impuestos estatales en los que participa, excepto en el de Sociedades, y una comisión bilateral (Gobierno central-Generalitat) podrá modificar las condiciones del acuerdo cada cinco años sin necesidad de volver a reformar el Estatuto.Agencia tributaria: Propia no, consorciadaLos partidos políticos que apoyaban la propuesta de estatuto inicial aspiraban a la creación de una agencia tributaria propia. El nuevo texto establece que la Agencia Tributaria de Cataluña 'gestiona, recauda, liquida e inspecciona todos los tributos propios y los estatales cedidos totalmente'. De momento, se crea una agencia consorciada que en dos años podría derivar a una propia.Inversiones: Siete años de equiparación al PIBLa inversión en infraestructuras es junto al de porcentaje de impuestos que se ceden uno de los capítulos donde el texto del Estatuto aprobado resulta más clarificador.La disposición adicional tercera establece que las inversiones del Estado en infraestructuras en Cataluña se equipararán al peso del PIB catalán sobre el total del español, en la actualidad un 18,5%, durante un periodo de siete años para paliar el déficit de inversiones existentes hasta ahora. El texto del anterior estatuto no establecía ninguna cifra ni garantía en este capítulo.Solidaridad: Un capítulo que no se cierraEl establecimiento de los mecanismos de solidaridad entre comunidades es uno de los elementos más polémicos y su valoración final dependerá de cómo se desarrollen los principios básicos que introduce el Estatuto aprobado. Uno de ellos es la nivelación parcial, según la cual el mayor esfuerzo fiscal de Cataluña revertirá en mayores ingresos para la Generalitat (artículo 206). Otro es el llamado principio de ordinalidad, que se ha tomado prestado del modelo federal alemán. En la práctica supone que la aplicación de los mecanismos de solidaridad no pueda alterar la posición de Cataluña en la ordenación de las rentas per cápita que había antes de la nivelación.El Estatuto cita diversos criterios para calcular las necesidades de gasto de cada una de las comunidades: población, inmigración, personas en situación de exclusión social, densidad de población y dimensión de núcleos urbanos.Competencias: Permisos de trabajo e inmigraciónEl texto aprobado ayer proporciona más competencias al gobierno catalán. Entre ellas figuran la concesión de permisos de trabajo y la fijación de cuotas de inmigración. Ninguno de los dos asuntos se mencionaba en el estatuto de 1979.Nación y lengua: Preámbulo y cooficialidadEl término nación aplicado a Cataluña aparece en el preámbulo como descripción de un sentimiento. El texto aprobado ayer mantiene la cooficialidad del catalán y del castellano.
Artur Mas pide la convocatoria inmediata de elecciones
El presidente de CiU, Artur Mas, pidió a Pascual Maragall que anuncie hoy mismo la fecha de las elecciones anticipadas, previstas para finales de año. El líder de CiU advirtió tras emitir su voto que una vez celebrado el referéndum del Estatut será el momento para pensar en las próximas elecciones porque ahora 'tenemos un gobierno en minoría, sin apoyos suficientes en el Parlament'. Por su parte, el líder de ERC, Josep Lluis Carod-Rovira, que reconoció 'la validez del resultado' de la convocatoria, abogó por retomar el diálogo entre los partidos catalanes, que había quedado 'tocado' en los últimos meses.Por su parte, el presidente del PP, Mariano Rajoy, aseguró que hará todo lo posible para que el Estatut no entre en vigor, y exigió al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero que paralice el resultado del referendum porque se trata de la 'liquidación de la España constitucional'. En la misma línea, el responsable del PP en Cataluña, Josep Piqué, indicó que la consulta había sido un fracaso porque se había hecho sin consenso, además de que suponía que 'dos de cada tres catalanes habían dicho en la consulta que estaban en contra o se desentendían' del nuevo Estatuto y se mostró a favor del 'derecho' de los ciudadanos a que se presente un recurso de anticonstitucionalidad, aunque no desveló si su partido emprenderá finalmente esta iniciativa.