Listos para contratar
El Gobierno envió ayer al Parlamento el real decreto-ley que pondrá en marcha, el primero de julio, la próxima reforma laboral. Aunque contiene modificaciones modestas de la normativa laboral, consolida mecanismos que han funcionado bien en los últimos años y han logrado sucesivos récords en la creación de empleo. Por tanto, a partir del próximo mes, las empresas dispondrán de nuevos incentivos para contratar con carácter fijo a cuantos trabajadores quieran, o convertir en fijos a los más de cinco millones de personas con las que tienen una relación laboral temporal. Además, dispondrán de ayudas directas y una rebaja en el despido, si se produjere. El Ejecutivo estima que al menos un millón de trabajadores serán convertidos en fijos durante los próximos meses, lo que supondría la mejor noticia para atajar la abultada temporalidad laboral, que llega ya al 34%, y que es una variable maldita de la economía española.