Italia exige aplazar la fusión de Abertis
La unión de Abertis y la italiana Autostrade para crear el primer grupo mundial de autopistas tropieza de nuevo con los recelos políticos. El grupo que controla la familia Benetton dijo ayer que 'toma nota' de la carta que ha recibido del ministro de Infraestructuras, Antonio Di Pietro, en la que invita a posponer las deliberaciones a la espera de 'todos los elementos útiles para una valoración apropiada de los términos exactos de la operación'.
Así lo explicó ayer Autostrade en un comunicado al término del consejo que presumiblemente iba a servir para dar un paso más en el proceso de fusión, que las juntas de accionistas de las dos compañías deben aprobar antes del 30 de junio. La afirmación de que 'toma nota' de la advertencia del Gobierno de Romano Prodi refleja que abre la vía a acatar sus requerimientos. La fusión confirmada el 23 de abril se produjo en pleno cambio de Ejecutivo, lo que ha suscitado profundas críticas en la coalición de centro-izquierda que ha tomado el relevo de Silvio Berlusconi.
Autostrade, en una muestra más de colaboración con el Ejecutivo, agrega en su comunicado que ha decidido ofrecer a la sociedad publica italiana concesionaria de carreteras y autopistas (ANAS) y a los gobiernos italiano y español 'cualquier aclaración' que le pidan 'para conocer completamente la operación'.
Además ha convocado una nueva reunión para el 16 de junio para 'evaluar las indicaciones que mientras tanto le hagan llegar las instituciones, que eventualmente se expondrán a la asamblea de accionistas'.
Consejo en Barcelona
Mientras, el consejo de Abertis se reunió ayer por la tarde. Al cierre de esta edición no había terminado la reunión, en la que se comentó el comunicado de Autostrade. El consejo convocará la junta extraordinaria de accionistas el próximo 30 de junio en segunda convocatoria para aprobar la creación de un grupo que valdrá en Bolsa 25.000 millones y tendrá 20.000 empleados.
Al margen, Abertis ha comprado, a través de su filial de aparcamientos Saba Italia, la concesionaria Italparcheggi al Grupo Borini por 11 millones de euros, que le aporta 2.700 plazas en el mercado italiano.