BAA se defiende de la opa de Ferrovial prometiendo más crecimiento del negocio
El primer grupo mundial de aeropuertos, el británico BAA, ha pedido a sus accionistas por cuarta vez que rechacen la opa de Ferrovial porque el precio no es adecuado. En contrapartida, para que no vendan sus acciones, promete un mayor crecimiento del negocio aunque guarda la baza del dividendo para el documento de defensa definitivo.
El esperado movimiento de los aeropuertos británicos para defenderse de la oferta pública de adquisición (opa) de Ferrovial y sus socios no incluye ninguna promesa de retribución al accionista. BAA ha preferido guardar la baza del aumento del dividendo, que normalmente emplean las compañías opadas para defenderse de las ofertas hostiles. No lo empleará, según los expertos, hasta el documento de defensa final que tendrá que presentar antes de fin de mes, 39 días después de que lanzaran la opa Ferrovial y sus socios, Caisse de Dépôts et Placement du Québec y el fondo GIC del Gobierno de Singapur.
En la carta que ha enviado a sus accionistas, BAA rechaza por cuarta vez el precio ofrecido por el consorcio de 8.750 millones de libras (12.600 millones de euros). El consejero delegado, Mike Clasper, les conminó a no vender sus títulos al segundo grupo de construcción y servicios español porque 'no es el precio adecuado' ni el 'momento adecuado'. En el aire sigue la contraoferta que planteó el banco estadounidense Goldman Sachs.
BAA aún no ha decidido si elevará el dividendo, según un portavoz, y puede valorar otras vías de retribución al accionista para convencerle de que no venda sus títulos.
De momento, le da varias razones, todas basadas en las expectativas de crecimiento futuro del negocio. Prevé que los activos crezcan un 20% hasta 2008, cuando abra la nueva terminal 5 del aeropuerto de Heathrow, la joya de la corona de BAA, que tiene los principales aeropuertos británicos y gestiona otros en Australia, EE UU, Italia y Hungría. Además, estos activos se enriquecerán, según la compañía, con un plan de inversiones de 9.500 millones de libras (14.250 millones de euros), lo que no distorsiona radicalmente lo presupuestado hasta ahora.
El consorcio espera
Entre los aspectos que servirán para impulsar el grupo, BAA cita el ahorro de 49 millones de libras por aumento de la eficiencia y otros 16 millones en ingeniería de procesos y otras actividades, así como el recorte de 900 empleos hasta 2009. En el recién adquirido aeropuerto de Budapest, habrá nuevos ingresos procedentes de la venta de los negocios de transporte interno, aprovisionamiento de carburante y servicios en tierra (handling). A esto se unirá, según las estimaciones, un crecimiento de ingresos en el negocio de tiendas en aeropuertos y el esperado aumento de tarifas (que fijan las autoridades británicas) al máximo en el aeródromo londinense de Stansted, como ha comunicado en un documento enviado a la Bolsa de Londres.
æpermil;sta es la promesa que tienen que valorar los accionistas de BAA frente a los 810 peniques por acción en metálico que ofrece el consorcio liderado por el segundo grupo español de construcción y servicios. Aunque aún está por debajo de la cotización de BAA.
Todo apunta a que el consorcio que lidera Ferrovial, por su parte, no moverá ficha en la partida hasta tener datos concretos de retribución que BAA pueda prometer a sus accionistas.
Fuerte tirón del beneficio
Mientras BAA rechazaba de nuevo ayer la oferta de Ferrovial, el grupo que preside Rafael del Pino presentó un fuerte tirón del beneficio en el primer trimestre. El mercado premió ambas cosas con una subida del 2,9%. En el comunicado sobre los resultados, la compañía recordó que la opa sobre los aeropuertos británicos es unilateral y no necesita la recomendación del consejo de BAA para seguir adelante.La empresa ganó 112 millones, un 44% más, sobre todo, por el impulso de la actividad en el exterior, que aportó un 79% más a los ingresos, 1.253 millones (la mitad de la facturación). Por negocios, la construcción, que durante el año pasado pasó por etapas de menor incremento que el resto de actividades, creció un 27%. En ello influyó el crecimiento del 22% de la filial polaca Budimex y la incorporación de la constructora tejana Webber que el grupo compró el verano pasado. Infraestructuras, con las autopistas de Cintra, y servicios, que aportó el 42% de las ventas y creció un 59%, completaron el trimestre récord de Ferrovial.