El Gobierno apuesta por dialogar con Bolivia
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, reconoció ayer que la decisión del presidente de Bolivia, Evo Morales, de nacionalizar los hidrocarburos plantea un problema a España, pero apostó por el diálogo. Zapatero opinó que hay que escuchar al Gobierno boliviano para conocer la oferta que realiza a las empresas afectadas.
El presidente Rodríguez Zapatero aseguró que el Gobierno defenderá los intereses de las empresas españolas e insistió en que se hará 'un esfuerzo político y diplomático' ante el panorama abierto con la decisión adoptada el pasado lunes por el presidente de Bolivia, Evo Morales, de nacionalizar los hidrocarburos y ocupar con tropas militares los campos y las refinerías petrolíferas. El presidente calificó la situación que afecta de plano a la empresa española Repsol YPF como de 'problema puntual'.
En una conversación informal con periodistas tras participar en un acto celebrado en el Ateneo de Madrid con motivo del 75 aniversario de la Federación de Enseñanza de UGT (FETE-UGT), Zapatero afirmó que la ayuda al desarrollo que España destina a Bolivia 'en absoluto' va a verse afectada. 'El pueblo boliviano va a tener siempre a España a su lado más allá del conflicto puntual', señaló.
El jefe del Ejecutivo subrayó que quedan seis meses, en referencia al periodo que el Gobierno boliviano ha marcado para que las multinacionales presentes en ese país adapten sus contratos a la nueva decisión o, de lo contrario, se marchen. Rodríguez Zapatero opinó que ante esta situación lo primero que debe hacerse es escuchar al Gobierno de Bolivia para ver 'la posición de oferta con las empresas' y, concretamente, con Repsol YPF con el objetivo de conocer 'cuál es la condición de socio de la que hablamos'.
El presidente confirmó que el martes mantuvo una conversación telefónica con el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, quien le llamó para hablar sobre las indemnizaciones a ciudadanos españoles que vieron expropiadas sus tierras en este país, pero que también hablaron de Bolivia. Chávez dijo conocer de antemano la decisión que iba a adoptar el Gobierno boliviano y opinó que existen posibilidades de acuerdo mediante el diálogo. Zapatero consideró 'previsible' mantener una conversación personal con Evo Morales la próxima semana en Viena con motivo de la cumbre UE- América Latina y Caribe. Zapatero también confirmó que el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, mantuvo el martes una conversación con Morales. En la conversación mantenida entre Moratinos y el presidente boliviano, éste aseguró que su voluntad no es expulsar ni rechazar a las empresas extranjeras que operan en el sector de hidrocarburos.
Según explicó Moratinos, Morales mantiene que el Gobierno boliviano desea ser patrón, es decir soberano, sobre sus recursos, pero que no excluye socios para la ejecución de la política en materia económica y financiera. Moratinos explicó que la voluntad del mandatario boliviano es 'establecer y mantener un diálogo' en este periodo de 180 días con las empresas de hidrocarburos extranjeras y, en particular con Repsol, 'para encontrar una solución que satisfaga a ambas partes'.
Delegación técnico-política a Bolivia
Por su parte, Moratinos transmitió a Morales 'la firmeza y preocupación' con la que afronta el Ejecutivo español su anuncio de nacionalización de los yacimientos de hidrocarburos, aunque 'al mismo tiempo' la voluntad de encontrar una solución. 'De ahí que surgiese la propuesta del envío de una delegación técnico-política para evaluar el decreto y encontrar soluciones satisfactorias', precisó el ministro tras desvelar que esta iniciativa fue del propio presidente boliviano.
Por su parte, el ministro de Industria, José Montilla, que también abogó por el 'diálogo político y diplomático' manifestó que el Gobierno 'tratará de hacer compatible la defensa de los legítimos intereses de las empresas españolas con los legítimos intereses de los Estados que son soberanos en su toma de decisiones'.
Reacciones. El PP pide que Montilla y Moratinos comparezcan en el Congreso
El portavoz del PP en el Congreso, Eduardo Zaplana, anunció ayer que su grupo parlamentario ha exigido que los ministros de Industria y de Exteriores, José Montilla y Miguel Ángel Moratinos, respectivamente, expliquen en el Congreso las consecuencias que puede tener en las empresas españolas en la nacionalización de los hidrocarburos en Bolivia.Zaplana afirmó que es necesario que los ministros ofrezcan explicaciones en sede parlamentaria porque el presidente boliviano, Evo Morales, ¢se ha reído¢ del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero.Por su parte, el portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Durán Lleida, se mostró preocupado por la nacionalización y recordó ¢la gran responsabilidad¢ que tiene el Gobierno español en esta coyuntura por su ¢autoridad política y moral¢ en esta zona del mundo.Durán señaló que la medida adoptada por el Gobierno boliviano ¢no es una buena noticia¢, ni siquiera para su país, por la falta de confianza que genera en los mercados y en los inversores. El portavoz de CiU dijo que esperan del Gobierno español ¢la diligencia necesaria¢ para atajar el conflicto.
Preocupación La UE dice que seguirá de cerca el desarrollo de los acontecimientos
La Unión Europea pidió ayer a Bolivia que dialogue con las empresas afectadas por la nacionalización de los hidrocarburos para mantener la confianza de los inversores y seguir desarrollando su industria energética. La medida adoptada por el presidente boliviano afecta a empresas europeas como Repsol YPF, la británica British Petroleum y la francesa Total, por ejemplo.El comisario de Energía, Andris Piebalgs, y el ministro austriaco del ramo y presidente de turno del Consejo, Martin Bartenstein, hicieron público un comunicado en el que toman nota del 'inesperado anuncio' del Gobierno boliviano y expresan su 'preocupación' por el anuncio de que recurrirá al ejército para ocupar las instalaciones energéticas.Los dos representantes europeos han pedido al presidente boliviano, Evo Morales, que actúe de manera que 'mantenga la confianza de los inversores' y que garantice una 'colaboración sostenida' con las empresas afectadas a través de un 'diálogo activo y afectivo'.Asimismo, anuncian que seguirán de cerca el desarrollo de los acontecimientos durante los próximos meses.