La salud y la cultura desplazan la playa como motivo turístico
El turista europeo está cansado de viajar para estirarse en la playa y tomar el sol. Hace años que el sector advierte que este modelo está en crisis y todo apunta a que será la salud y el cuidado del cuerpo los que tomen el relevo como principal motivación a la hora de elegir un destino. Eso al menos es lo que se desprende del estudio Viajeros europeos 2010 realizado por la escuela de negocios Esade y dirigido por Josep Valls, catedrático de dirección de marketing.
Las playas no se van a quedar vacías, porque el cambio de preferencia no supondrá una caída en este tipo de turismo, advierte Valls, sino que asistiremos a un mayor crecimiento de los viajes motivados por el cuidado del cuerpo, la cultura, la asistencia a eventos puntuales, la visita a ciudades concretas o la gastronomía y el vino.
El cambio de preferencias tampoco influirá sobre la distancia de los desplazamientos realizados o, dicho de otro modo, seguirá creciendo ese 15% de europeos que viaja al menos una vez al año fuera del continente. Las razones para viajar son válidas tanto para los desplazamientos de varias semanas como para los fines de semanas o puentes, el tipo de desplazamiento en el que se avecinan más cambios. El estudio revela que en el año 2010 los turistas europeos realizarán al año entre seis y siete viajes de fin de semana (con una duración media de 1,5 días), frente a los 4,2 desplazamientos actuales de este tipo.
El viajero europeo realizará entre seis y siete salidas de fin de semana
Los días libres (la suma de vacaciones, sábados y domingos) que se destinarán a viajar aumentarán un 29,3%, hasta alcanzar los 40 anuales.
Los cambios pronosticados afectarán también al perfil de los turistas, con el surgimiento de nuevos segmentos demandantes. En este sentido, el estudio señala a los seniors (jubilados o tercera edad) y a los jóvenes, por motivos de estudio, como nuevos clientes a los que prestar atención.
Capítulo aparte merecen los inmigrantes, que en la actualidad ya están generando un mercado específico con los desplazamientos a sus lugares de origen. 'Los que están en España aún viajan poco a otros destinos porque están en un primer ciclo de consolidación', explica Valls, 'pero poco a poco, a la vez que mejore su situación económica, se irán incorporando como clientes potenciales'. En el último lugar del ranking aparece los singles (término inglés para personas sin pareja) como otro de los colectivos con necesidades y gustos propios.
La manera en que se preparan los viajes también cambiará. De hecho, se consolidarán tendencias que ya se apuntan. Los viajeros planificarán personalmente sus escapadas, preferirán hacerlo a través de intermediarios presentes en Internet y las web de aerolíneas se generalizarán como centros de venta de plazas hoteleras, alquiler de coches y otros productos turísticos.
Los vuelos de bajo coste continuarán con su crecimiento, de tal manera que se prevé que en el año 2010 superen a los regulares y a los chárteres. Incluso aparecerán nuevos núcleos vacacionales en torno a los aeropuertos especializados en bajo coste, según el estudio de Esade.