'IBM sola puede ofrecer lo que antes hacían 12 marcas diferentes'
IBM es la segunda empresa de software más importante del mundo. Mike Borman, que se incorporó a la compañía en 1977 como programador, se ocupa de dirigir esta unidad, que aportó 15.800 millones de dólares a las ventas de 2005.
IBM ha anunciado una nueva estrategia de información a la demanda en la que va a invertir 1.000 millones de dólares y que supone crear una plataforma en la que se puedan integrar todas las bases de datos de una compañía, sea cual sea la marca de la aplicación que se está utilizando. Mike Borman es el responsable de ejecutar esta estrategia, que va a requerir impulsar los desarrollos propios, que van a combinar con algunas compras estratégicas.
En los últimos años IBM se ha centrado en los servicios, ¿cree que esta estrategia ha dejado en un segundo plano al negocio del software?
Nos gusta hablar de todas nuestras divisiones en términos de rentabilidad. Cada una es importante. Los clientes vienen a IBM a buscar una solución completa. No me preocupa que haya un énfasis extra en los servicios; todos sabemos que somos más valiosos de manera integrada que por separado. En facturación hemos aportado 1.800 millones de dólares al total de las ventas de 2005, que llegaron a los 91.000. Desde el punto de vista de beneficios, el hardware aporta el 20%; los servicios, el 35%, y el software contribuye con un 37%.
'Las pymes son muy importantes, ya que aportan el 25% de las ventas en España'
¿Qué significa su estrategia de información a la demanda?
Las empresas tienen cientos de bases de datos y un montón de aplicaciones diferentes que hacen que la información esté esparcida por toda la organización, está distribuida en islas, está bloqueada. Queremos ofrecer un servicio que permita conseguir los datos de los distintos sistemas, ya sea una base de datos de Oracle o una DB2, o sea un correo electrónico o una hoja de Excell, y presentar la información en un formato que pueda ser analizado y esté segura. Estamos invirtiendo mucho dinero para conseguirlo: por un lado, vamos a hacer nuestros desarrollos y, por otro, haremos compras como la última de Essential, muy importante para la gestión de información, y construir nuestra oferta. Pero también vamos a formar a más de 15.000 personas para que estén preparadas para vender estas soluciones. Además, esto es un anuncio de todo IBM, tenemos esta capacidad en software, que irá unida con los servicios.
¿Considera que el software ya se ha convertido en un servicio más?
Hay muchas formas de entender el software como un servicio. Ya sea porque uno escribe un programa para una compañía y hay un flujo de trabajo continuado. Esto es un servicio particular en el que escribes código y lo mantienes para un solo cliente. La continuidad de este concepto fue crear un software tan general que se lo puedes vender a cada empresa. Entonces, es una propiedad intelectual que puedes vender y a cuantas más empresas, mejor.
Están comercializando SAP en un modelo de alquiler. ¿Van a extender esta línea de negocio?
Este modelo no gusta a todos los clientes, pero hay empresas pequeñas que no quieren tener que comprar todo el equipo, sólo desean algunas de sus funcionalidades, y prefieren que otro lo gestione. A éstos les ofrecemos un modelo de alquiler de aplicaciones. No es tan nuevo, ya lleva tiempo y va a continuar creciendo, pero hay empresas que quieren tener el control completo de la aplicación. Veremos más de esto.
¿Cree que la consolidación del mercado de las aplicaciones favorece al cliente?
Hace cinco o seis años nacieron muchas compañías con el boom de las puntocom, cuando había muchas empresas de capital riesgo y se conseguía salir a Bolsa fácilmente, lo que provocó que hubiera más oferta de software que demanda real. Aún quedan muchos proveedores, pero no han logrado crecer y llegar a nuevos clientes, y por eso se están produciendo compras y fusiones. Para el cliente final va a ser positivo porque no va a tener que comprar 15 productos de distintas empresas. Hoy pueden firmar un contrato único con IBM de información a la demanda, con todos los productos integrados. Antes, para tener lo mismo necesitaban firmar con 12 marcas diferentes.
¿La demanda de las corporaciones está cubierta y por eso todos se centran en las pymes?
Yo he sido responsable de pymes en los noventa y, en realidad, no ha cambiado nada demasiado. Siempre han sido importantes porque son más, crecen muy rápido y gastan mucho dinero en tecnología. Eso no significa que las corporaciones no sean importantes, pero hay que tener muy en cuenta a las pymes. Nosotros dedicamos grandes esfuerzos a la pyme, es un segmento que creció un 10% para nosotros el año pasado y representa un 20% de nuestra facturación. En España, hasta un 25%. Y eso que tenemos una cuota de mercado pequeña. Por eso vamos a invertir 500 millones para mejorar el canal de ventas; además contamos con soluciones específicamente adaptadas a sus necesidades en las que ponemos el término Express en todas nuestras líneas de producto como Lotus, DB2, Tivoli. No son sólo software, son una solución completa.
¿Tienen planes para la mensajería de voz IP?
Acabamos de completar nuestra integración con Micromuse. Son 400 empleados que ya se han incorporado a IBM en Europa. Las empresas están tratando de integrar voz, vídeo y datos, el famoso triple play. Micromuse nos va a facilitar manejar toda la información venga de un ordenador, un teléfono o un dispositivo móvil. En este mundo, la voz sobre IP es sólo una de las áreas. Pero en la feria de Lotus, ya anunciamos un acuerdo con AOL y Google Talk para hacerlos compatibles con nuestro sistema de mensajería SameTime. Nuestras aplicaciones están en un buen momento.
¿Veremos más compras en breve?
Estamos preocupados por crear una plataforma de software que sea escalable y abierta. Vamos a hacer todo lo posible para ofrecérsela a nuestros clientes, ya sea construyendo nuevas funcionalidades nosotros mismos, como las que vamos a anunciar en los próximos meses, pero si es más conveniente acudiremos a socios o compras.
'Las ventas de Linux crecen más que las de Windows'
IBM es uno de los principales distribuidores de Linux, el sistema operativo de código abierto que sigue ocupando un lugar importante en su estrategia a pesar de que ya ha dejado de ser noticia en los periódicos. 'Antes había más dudas sobre fiabilidad, las empresas se preocupaban por el soporte y por la calidad. Hoy se han superado estos temores porque ya lo han probado y lo usan en sus aplicaciones web', asegura Mike Borman, quien dice que Linux sigue manteniendo un gran ritmo de crecimiento.'Linux sigue creciendo con dobles dígitos y nos facilita grandes ingresos para nuestra plataforma. Los clientes compran Linux a un ritmo más rápido del que compran Microsoft. Esto es así desde hace unos cuatro o cinco años', añade Borman, quien se muestra muy satisfecho con la estrategia seguida por IBM con el software de código abierto.'Creo que toda la industria del código abierto va a seguir evolucionando en el futuro', asegura Borman, que cree que todas las compañías se han sumado a esta tendencia, aunque con aproximaciones diferentes.'El área del código abierto es muy compleja. Es difícil saber qué parte se puede embeber, es muy complicado y con muchas cuestiones legales asociadas. Hay veces que Linux es de código abierto, pero no todo lo que va sobre Linux es necesariamente abierto', apunta este ejecutivo. Borman insiste en que la apuesta de IBM por Linux sigue siendo tan firme como el primer día y que las expectativas puestas en estas soluciones son igual de alentadoras. 'Tenemos un equipo de ventas exclusivamente dedicado a Linux, que se dedica a promocionarlo por todo el mundo'.