Cómo darle sustancia a la segunda fase de Merkel

Angela Merkel tuvo un inicio extraordinario como canciller de Alemania en noviembre pasado (...) y los resultados de su Partido Democristiano fueron sorprendentemente buenos en las elecciones regionales del pasado domingo (...).

El domingo, prometió una 'segunda fase' centrada en las reformas domésticas (...). El problema es que (...) se suelen denominar así asuntos macroeconómicos de importancia secundaria (...). Si Alemania quiere mejorar su productividad a largo plazo, son más urgentes otro tipo de reformas. Su crecimiento económico depende demasiado de las exportaciones. El país tiene un sector de servicios inadecuado, barreras elevadas a la entrada de muchos negocios y profesiones, un enfoque muy burocrático a la competencia, una reglamentación corporativa que protege a los nacionales frente a los extranjeros (...) y un sector financiero doméstico inadecuado (...).

Para que su promesa de segunda fase tenga sustancia, la señora Merkel debe actuar en al menos alguno de estos puntos (...).