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CincoSentidos

Hoteles en la vanguardia de la decoración internacional

El diseño gana terreno para crear espacios que sean conocidos por estilo

Ya no son únicamente los más afamados hoteles de las grandes ciudades españolas. También otros muchos se han convertido en referencia y vanguardia de la decoración. Con participación de prestigiosos arquitectos internacionales de interiores o con presupuestos más modestos son decenas los establecimientos hoteleros que compiten por ser conocidos por sus ambientes innovadores. Y tanto en el diseño de sus habitaciones, baños, como en salones, restaurantes, y en lo que ahora se ha convertido en unos elementos imprescindibles para un hotel fashion: el spa.

En ocasiones imitan a los más emblemáticos de Nueva York, Sidney o Hong Kong, aunque otros prefieren entrar en las guías internacionales como lugares muy especiales. Son los que han dado alas a creadores, como Philippe Starck, para luego convertirse en los mitos de referencia del diseño.

En Barcelona, en donde existen tanto establecimientos emblemáticos, Ámister quiere ser un hotel en donde se pueda disfrutar de las obras de artistas, conocidos o emergentes, de la pintura, escultura y fotografía. En este lugar se ha optado más por los tonos que sean un marco idóneo para las piezas que están repartidas por habitaciones y salones. Ámister se encuentra ubicado en un edificio rehabilitado de principios del siglo XX y se mantiene, en el interior y exterior, dentro del estilo modernista.

También en esa ciudad, Hotel Arts intenta mantenerse en el ámbito, entre elitista y refinado, que consiguió desde su inauguración en 1994. Para ello ha abordado una remodelación en todos sus espacios, en donde los colores que predominan son los de la arena y las piedras. Y las puertas translúcidas, una de las aportaciones favoritas de los diseñadores más relevantes de la actualidad, y las líneas regulares se han incorporado a diversos espacios.

Con la remodelación del Arts, bajo la directriz de GCA Arquitecs, se ha introducido en uno de los vestíbulos lámparas de grandes proporciones que cambian de tonalidad en función de la hora del día a paneles con telas iluminadas; y también sofás de dimensiones poco comunes. En uno de sus restaurantes, el que dirige Sergi Arola, el primer impacto es de la luz y los colores propios del Mediterráneo. Este establecimiento barcelonés fue elegido el pasado año como hotel español de referencia por World Travel Awards.

Quizá una de las cadenas que ha cuidado con más imaginación la arquitectura interior de sus establecimientos es el grupo Derby. Y su última obra, el Urban de Madrid es posiblemente el mejor ejemplo. La libertad que ha dado a sus creadores y la combinación de elementos es tal vez lo que le sitúa más en la vanguardia. Y los legados artísticos de diversas civilizaciones son su fuerte: el antiguo Egipto, el misterio de India, el color de Turquía a través de sus kilims o los totems de Papúa Nueva Guinea están haciendo de este hotel, además de una referencia en la vida diurna y nocturna de la ciudad, casi un museo en un clásico barrio próximo al Prado y al Thyssen. Pero la modernidad tiene asimismo un ligar privilegiado, como se percibe en el Glassbar, que es considerado como uno de lugares más cool de la ciudad.

También otro gran grupo, como NH, pone énfasis en la decoración para que sus establecimientos, aunque tengan el sello de la cadena, cuenten con una personalidad propia. En el caso del Palacio de la Merced, en Burgos, en donde ocupa un edificio emblemático que data de los siglos XVI y XVII, con un claustro gótico flamígero en su interior. Pero el interior, se ha optado por un diseño moderno pero con glamour.

Como la globalización ha calado con fuerza en el diseño, Hacienda Na Xamena de Ibiza cuenta con habitaciones en estilo zen y decoración oriental, una de las preferencias de los diseñadores de los hoteles más sofisticados de Nueva York o Londres. Y Alcudia, Mallorca, un pequeño hotel de seis habitaciones muestra como la imaginación es una arma muy poderosa para crear escenarios del cine más novelesco.

Y Quo Godoy, uno de los últimos hoteles abiertos en Madrid, en la localidad de Villaviciosa de Odón, ha optado por ese modelo. El diseño, que ha corrido a cargo de Arquitectura y Decoración QBO, se centra en estilo y materiales modernistas, apoyándose en los juegos de colores, desde el lila al verde, y en la apertura al luz del exterior a través de grandes ventanales.

Puerta de América

Desde que la incorporación de arquitectos, modistos y otros gurús de la decoración a los hoteles es una realidad, no extraña que algunos de estos establecimientos se hayan convertido en centros de ensayo de las vanguardias del diseño y quizá un precedente que luego será asumido en la vida más cotidiana. En España uno de los casos más claros de esa trayectoria es el Puerta de América de Madrid.Allí se dieron cita desde el arquitecto Norman Foster a Jean Nouvel, Arata Isozaki o David Chipperfield. Y también Javier Mariscal y Victorio& Lucchino. En total 17 artistas que han competido por ser los más arriesgados, los más sofisticados o para ser un referente de la decoración. Y cada uno ha aportado una parte de su cultura: Isozaki, la luz claroscura del zen; Mariscal, la explosión de colores del Mediterráneo mientras que Victorio & Lucchino se arriesga hacia el barroco.

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