El Banco de España cifra en el 4,5 % los tipos que necesita la economía
Si la política monetaria siguiese en manos del Banco de España, los tipos de interés estarían al menos en el 4,5%. El jefe de estudios del organismo, José Luis Malo de Molina, explicó ayer que así se enfriaría el consumo privado y se facilitaría el deseable cambio en la composición del crecimiento español.
Ocho subidas más para adecuarse a las necesidades de la economía española. Según estimaciones del Banco de España, las dos recientes elevaciones de los tipos de interés decididas por el Banco Central Europeo (que tanto preocupan a los titulares de préstamos hipotecarios) deberían repetirse al menos hasta llevar el precio del dinero dos puntos por encima del actual 2,5%. El jefe de Estudios del Banco de España, José Luis Malo de Molina, cree que el alza enfriaría el consumo privado -alentado por el 'efecto riqueza' que causa el encarecimiento de la vivienda- y elevaría la tasa de ahorro, reduciendo las necesidades de financiación de la economía.
El análisis se basa en la 'regla de Taylor', según la cual el tipo de interés que equilibra la economía debe variar en función del PIB y la inflación. Así, a medida que crecen la producción y los precios, debe aumentar la tasa de interés nominal para evitar el sobrecalentamiento. Ese sería el caso de España en los últimos años: tanto el PIB como el IPC crecen muy por encima de la media comunitaria, que es la que tiene en cuenta el BCE para establecer su tipo de referencia. Malo de Molina exhibió un gráfico que concreta la subida adicional que sería necesitaría: más de dos puntos, en el escenario más laxo, y algo más de cuatro, en el más ortodoxo (según el tipo de interés real -descontada la inflación- se estableciera en el 1% o el 3%). De forma sintomática, la última vez que los tipos reales estuvieron cerca del nivel de equilibrio fue en 1998, antes de que los Estados miembros de la UE delegasen sus competencias monetarias al BCE.
Malo de Molina pronunció una conferencia, patrocinada por la Asociación para el Progreso de la Dirección, en la que explicó que los tipos aún fomentan el endeudamiento familiar y el consumo. 'El crédito al sector privado se está acelerando, particularmente el destinado a la vivienda' explicó. El crédito a las familias para compra de casas creció en enero un 23% interanual. Con estos mimbres, la necesidad de financiación extranjera está en niveles desconocidos: 6,5% del PIB, según la última balanza de pagos. Y eso que el euribor, tipo de interés de referencia para casi todas las hipotecas, superó el lunes el 3,1%, su valor más alto en tres años y medio. La mitad de las hipotecas vigentes fueron contratadas cuando los tipos estaban en su mínimo histórico, por lo que las cuotas se resentirán en los próximos años.
Pero la tendencia iniciada por el BCE, es la adecuada: una 'menor holgura monetaria', junto a la recuperación de la zona euro, ayudarán a recomponer el modelo de crecimiento español, excesivamente centrado en el consumo privado y la construcción.
El jefe de estudios del Banco de España alertó también del escaso crecimiento de la productividad del factor trabajo. Los costes laborales unitarios crecen poco en términos históricos, pero demasiado si se comparan con los de nuestros principales socios comerciales: desde la implantación del euro, han aumentado un 20% más que en Alemania.
'Ligera moderación' del crecimiento
La senda de crecimiento del PIB seguirá en los próximos años 'con una ligera moderación', según las previsiones del jefe de estudios del Banco de España. El organismo espera un progresivo reequilibrio de la economía española, a medida que la inversión productiva tome el relevo a un consumo privado que debería enfriarse cuando se llegue al tope de capacidad de endeudamiento familiar. Además, el sector exterior recortaría una tajada menor al crecimiento, si se confirma la recuperación de la zona euro. Algo muy probable: 'La zona euro estará en los próximos dos años cerca de su crecimiento potencial', dijo.