Las nuevas tarifas ponen en peligro la calificación de las eléctricas
La última reforma en las tarifas de la luz aprobada por el Gobierno no sólo ha sentado mal en el sector. Las agencias de calificación también advierten del potencial impacto negativo. S&P, Moody's y Fitch avisan de que la reforma pone en riesgo las perspectivas de beneficios y la valoración de la calidad de la deuda.
Prácticamente toda la deuda emitida por las grandes empresas del sector eléctrico español corre el riesgo de ser rebajada de calidad. La última amenaza es la reforma tarifaria aprobada por el Real Decreto 3/2006 del pasado 24 de febrero. La medida impone un precio máximo (provisional) de la energía que se vende entre empresas del mismo grupo en el mercado mayorista, el pool, y limita la repercusión del coste de los derechos de emisión de CO2 en los precios. Un impacto global de 3.450 millones en los ingresos, según el Gobierno. En consecuencia, las agencias de rating planean bajar la calificación del sector si no se modifica el marco regulatorio, que es temporal.
'Desde una perspectiva de rating, el impacto es negativo por varias razones: crea incertidumbre regulatoria, reduce la confianza de los inversores en el sistema y es una medida arbitraria que reduce el problema del déficit tarifario, pero no resuelve la raíz del mismo: la falta de transparencia y un reflejo efectivo de los costes de generación en las tarifas', resume Ana Nogales, analista de Standard & Poor's.
S&P tiene en vigilancia negativa a todo el sector. Las calificaciones varían del A+ de Iberdrola y Gas Natural, seguridad financiera, pero con riesgo de inestabilidad; la A de Endesa, un paso menos que las otras dos, y BBB+ de Endesa, muy cerca ya de la categoría de bonos basura.
'La nueva regulación es bastante restrictiva y ha creado incertidumbre. Esta decisión del Gobierno podría impactar negativamente en la valoración', confirma Helen Francis, analista senior de Moody's. 'De todos modos hay que esperar y ver. Esta puede ser una situación temporal, ya que hay una elevada expectativa de que el Gobierno acuerde en verano un nuevo marco regulatorio más favorable', advierte Francis.
Moody's tiene en revisión para una posible rebaja a Iberdrola y Gas Natural (con categoría A2, equivalente a A+), la perspectiva también es negativa para Endesa (A3, similar al A de S&P y Fitch) y sólo estable en Unión Fenosa (Baa2, también, el penúltimo escalafón antes de caer en grado especulativo).
'El precio provisional está significativamente por debajo del precio de mercado', afirma Erwin Van Lumich, de Fitch Ratings. 'Los primeros meses evidencian el riesgo de otro déficit de tarifa, a pesar del incremento del 4,48%, reflejando claramente que las tarifas están lejos de la realidad del mercado', diagnostica Van Lumich. 'Alterando la ecuación de los ingresos a través de medidas regulatorias, las perspectivas de beneficios del sector pueden verse dañadas', concluye.
Fitch tiene con calificación A y vigilancia negativa a Endesa, Iberdrola y Gas Natural. Unión Fenosa tiene perspectiva estable, pero con calificación de BBB+.
Pregunta y respuesta: El complejo mercado eléctrico
¿En qué consiste el llamado pool eléctrico?Al no poder almacenarse, la electricidad se genera en función de unas previsiones de demanda que determina de un día para otro el administrador del mercado, OMEL. La distribución y la generación están separadas jurídicamente, por lo que las distribuidoras tienen que comprar la energía en la subasta del llamado pool. El precio se fija así: primero entran las centrales que generan más barato (hidráulicas y nucleares) y en función de las necesidades de demanda se van añadiendo las centrales con costes más altos (carbón, ciclo combinado y fuel). La última central en entrar es la que marca el precio al que se pagará en realidad toda la energía vendida.¿Qué es el llamado déficit tarifario?Las distribuidoras compran al precio que se fija en el pool, pero el precio de venta de la electricidad al consumidor final está regulado. Por eso, puede llegar a darse el caso de que el precio del pool sea superior a la tarifa que se le puede cobrar al usuario. Ese diferencial es el déficit tarifario. Una vez que ese déficit de tarifa es aprobado por el Gobierno, se repercute a los consumidores. Pero la subida se
Impacto negativo en las valoraciones
La imposición de un límite máximo -que es provisional- en el precio de la energía para la compra y venta entre empresas del mismo grupo, fijado en 42,35 euros por megavatio/hora ha llevado a las firmas de análisis a revisar sus valoraciones de las compañías del sector.'Hemos recortado nuestras previsiones medias de beneficios por acción en el sector un 12% para 2006', afirman desde BNP Paribas, que ha rebajado a neutral la recomendación sobre Iberdrola. 'El mayor impacto será en Endesa (15%), seguido por Iberdrola (10%), Unión Fenosa (9%) y Gas Natural (5%)', completa el banco francés.Desde que el Gobierno anunció la reforma el pasado 24 de febrero, ninguna de las compañías afectadas ha conseguido remontar la cotización. Gas Natural pierde un 5,28%, aunque aún gana un 3,68% en el año; Endesa cae un 2,99%, pero la revalorización desde enero es del 23,76%; Iberdrola retrocede un 2,67%, que deja la ganancia anual en el 16,5% y Unión Fenosa recorta un 1,96%, lo que limita su apreciación bursátil en el presente ejercicio al 1,40%.'Si se mantuviera un límite similar hasta la liberalización prevista en 2011, el impacto en los precios objetivos sería de un descenso del 7% al 11%', apuntan desde Credit Suisse.