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Editorial
Es responsabilidad del director, y expresa la opinión del diario sobre asuntos de actualidad nacional o internacional

Las empresas pulverizan su récord

El año 2005 será para recordar. Las empresas han pulverizado todos sus récords de resultados, y lo han hecho con suficiente solvencia para confiar en su solidez financiera. Las 35 del Ibex ganaron un 44% más -hasta superar los 37.200 millones de euros-, y en la misma línea cerraron el año las compañías del mercado continuo (+43%). Así, el club de las empresas que ganan más de 3.000 millones ha pasado de dos a seis miembros: Santander, Telefónica, Arcelor, BBVA, Endesa y Repsol -dos de estas compañías, inmersas directamente en sendas opas-. Y el club de los 1.000 millones alcanza los nueve socios: Móviles, Iberdrola y Cepsa, además de las anteriores.

Lo mejor de estos beneficios es que su crecimiento es además rentable y no supone deterioro de los márgenes. La prueba de esa fortaleza es que el beneficio de explotación -más del 23% en las empresas del Ibex y en el resto- creció en línea con la cifra de negocio.

El holgado aumento de ésta, por encima del 20%, debido tanto al crecimiento orgánico como a las adquisiciones, es clave en los espectaculares resultados. Las sociedades que han realizado compras -Santander, Telefónica, BBVA...- son las que más han crecido. Por sectores, la fortaleza de la demanda se ha notado especialmente en el energético -también impulsado por los precios del crudo- y en la construcción. Esta, aunque ha moderado ligeramente su crecimiento, sigue viviendo años virtuosos de negocio y está aprovechando para diversificarse hacia los servicios.

Si a lo anterior se añade la mayor aportación del negocio en Latinoamérica, el favorable marco cambiario, la fortaleza de la demanda interna, el efecto positivo en algunos casos de las nuevas normas contables y el aporte de los beneficios extraordinarios se conforma un escenario de todo a favor difícil de repetir. Sin embargo, las grandes adquisiciones -como la de O2 por Telefónica o el Abbey por el Santander- aún tienen recorrido. Estos resultados son el mejor sustento para una Bolsa que, impulsada a la vez por las operaciones empresariales, alcanzó ayer su mejor cota en seis años.

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