Volkswagen negocia volver a la semana laboral de 35 horas
Los empleados de Volkswagen (VW) en Alemania deberán trabajar 35 horas por el mismo dinero; es decir, cinco días a la semana en lugar de cuatro como hasta ahora. El mayor fabricante automovilístico europeo ha anunciado que empezará a negociar esta misma semana con los sindicatos su nueva estrategia para reducir los costes laborales y reordenar todos los procesos industriales. Según Der Spiegel, Bernd Pischetsrieder, presidente de VW, se propone introducir en todas las plantas alemanas el modelo de negocio 'de bajo coste' de su filial Auto 5000; lo que implicaría una reducción salarial del 20%.
Los empleados de Auto 5000 -que fabrica el VW Touran- trabajan hasta 42 horas semanales y deben resolver defectos de producción sin compensación económica. Tampoco se les remuneran las pausas de descanso. Cobran 2.600 euros brutos mensuales; es decir lo mismo que sus compañeros de VW trabajando sólo cuatro días o 28,8 horas a la semana.
El jefe del comité de empresa, Bernd Osterloh, ha calificado de positivo que la reestructuración no se limite exclusivamente a los costes salariales. 'Nosotros hemos pedido siempre que se estudien todos los procesos y estructuras de la empresa: desde los componentes hasta las plantas montadoras.' La cuestión ahora es si el viraje de la compañía implicará el cierre de plantas.
A Pischetsrieder se le critica haber vacilado durante demasiado tiempo y no haber hablado claro. Hasta ahora había resultado extremadamente difícil imponer cambios radicales con un consejo de vigilancia en el que tanto los representantes de los trabajadores como del estado de Baja Sajonia, que dispone del 18,2% de las acciones, coincidían en que la prioridad era mantener los puestos de trabajo y los privilegios laborales. Esta situación cambió en septiembre, con la entrada de Porche como primer gran accionista.
Esta misma semana se presentará en Berlín el pequeño todoterreno Concept A. El proyecto será asumido por Auto 5000 en Wolfsburg. La 'filial de bajo coste' de Volkswagen paga lo habitual en el sector del metal pero un 20% menos que lo estipulado en el convenio de VW.
La entrada de Porsche marca el cambio
Según el experto automovilístico alemán Ferdinand Dudenhöffer, la entrada de Porsche en VW ha sido clave en los planes de reestructuración anunciados. Porsche trabaja con sus proveedores y coopera con otros fabricantes para ahorrarse una parte de los costes de desarrollo técnico. Un 80% de los deportivos de Porsche están montados con componentes adquiridos a terceros. En el caso de Cayenne, sólo el 10% es Porsche. Y el mercado le da la razón al fabricante de Stuttgart: el precio de sus acciones se ha multiplicado por seis desde 1995. El jefe de Porsche, Wendelin Wiedeking, está considerado en Alemania como uno de los mejores ejecutivos del mundo del sector. Sacó a Porsche de la crisis y saneó la empresa. Para ello contrató incluso a expertos de Toyota. El todoterreno Cayenne se ha desarrollado conjuntamente con VW.