Un paso muy pequeño para los investigadores
Los becarios se quejan de que el nuevo estatuto no los considera profesionales de pleno derecho hasta el tercer año
Los investigadores tendrán en breve un nuevo texto legal que regulará su actividad. Su situación laboral avanza, aunque no al ritmo que ellos quisieran. El Consejo de Ministros aprobó la semana pasada el Real Decreto por el que se regula el Estatuto del Personal Investigador en Formación (EPIF), que sustituye al actual Estatuto del Becario de Investigación y que, según el Ministerio de Educación y Ciencia, 'supone una mejora muy importante en las condiciones laborales de los científicos que comienzan su carrera profesional'. Las organizaciones de becarios no están tan de acuerdo.
Las principales novedades del estatuto es que éste establece 'la incorporación inmediata de los becarios predoctorales de primer y segundo año al Régimen General de la Seguridad Social', al que antes no podían adscribirse, así como 'la transformación de las becas de tercer y cuarto año una vez obtenido el Diploma de Estudios Avanzados, el DEA al régimen de contratación laboral. En cuanto a las becas posdoctorales, todas serán transformadas en contratos'.
El presidente de la Federación de Jóvenes Investigadores-Precarios, Xosé A. Álvarez, reconoce los avances de este texto, 'porque es un paso adelante que se empiece a hablar de seguridad social y de contratos para algunos becarios, pero es un paso pequeño si se quiere converger con Europa. Seguimos lejos de las recomendaciones de la Carta Europea del Investigador y del Código de Conducta para la Contratación de Investigadores'.
En opinión de los principales afectados, la situación laboral de los becarios no mejora en exceso. 'Lo que nos preocupa son las condiciones de trabajo, asuntos como las cotizaciones y la prevención de riesgos laborales, aspecto en el que seguimos estando descubiertos', asegura Álvarez. El presidente de FJI-Precarios advierte de que 'este estatuto crea dos tipos de becarios, unos con derechos y otros sin ellos. Aquellos que no poseen el DEA no tienen derecho al desempleo y su cotización a la Seguridad Social es reducida'. Por ejemplo, una becaria que está de baja por maternidad pasa a cobrar un 40% menos. Los becarios se quejan de este sistema 2+2 (dos años de beca antes del DEA y otros dos después). 'El Diploma de Estudios Avanzados se obtiene en el segundo año de doctorado tras un trabajo de investigación', explica Álvarez. 'Dicen que antes del DEA el investigador no es productivo porque se está formando, pero eso es falso. Esa frontera es absurda y contraria a la recomendación europea', se queja el presidente de FJI-Precarios.
La recomendación europea
En marzo de 2005 la Comisión Europea aprobó el Código de Conducta para la Contratación de Investigadores, y alrededor de este texto se centran las reivindicaciones de los becarios. 'Lo fundamental es que pide que los becarios sean tratados como profesionales desde el inicio de la carrera investigadora', explica el presidente de la Federación de Jóvenes Investigadores, Xosé A. Álvarez. Esto implicaría, por ejemplo, la desaparición del sistema 2+2 (beca antes del DEA y contrato después).Lo que ocurre es que el 'código no tiene valor legal pero sí moral, y en el Gobierno no se ve intención de cumplirlo'. El código, entre otros aspectos, solicita a los patronos y proveedores de fondos que traten a los investigadores como profesionales y que les garanticen un entorno de investigación o de formación más estimulante, además de ofrecer los equipos, instalaciones y oportunidades adecuadas. Asimismo, deben garantizar la estabilidad y la permanencia del empleo y un salario atractivo, y reconocer el valor de la movilidad, que podrá ser geográfica, intersectorial, interdisciplinaria.