La opa hostil de Mittal sobre Arcelor desata la euforia en Bolsa
Mittal Steel, la mayor siderúrgica del mundo, sorprendió el viernes a los mercados al lanzar una oferta pública de adquisición de acciones (opa) hostil sobre Arcelor, su principal competidor, en una operación valorada en 18.600 millones de euros.
Si la maniobra de la compañía anglo-india prospera, el grupo resultante se convertiría en el primero capaz de producir y facturar 115 millones de toneladas de acero al año, tres veces más que la de su inmediato competidor Nippon Steel y con una cuota de mercado del 10% por volumen. Los analistas entienden que este puede ser el primer paso para una recomposición en el sector del acero que reduzca la excesiva fragmentación de la industria.
Con 320.000 trabajadores en todo el mundo, la nueva firma sumaría unos ingresos de 56.900 millones, con un beneficio bruto de explotación (Ebitda) de 10.392 millones y una capitalización aproximada de 33.000 millones. Las sinergias podrían superar los 825 millones en 2009.
El máximo responsable de la compañía, Lakshmi Mittal, explicó en rueda de prensa que la operación, que no supondrá en principio el cierre de plantas, acelerará los planes de crecimiento de la compañía en mercados como China o India. La unión de las dos empresas crearía un líder en cinco de los grandes mercados mundiales del acero (Sudamérica, Nafta, Unión Europea, Europa Central y África). Arcelor aportaría su importante presencia en Europa Occidental y Brasil, que complementaría la posición de liderazgo de Mittal en el Norte de América y Europa del Este.
La operación supondrá finalmente la venta de la canadiense Dofasco a Thyssen
Esta complementariedad permitiría evitar problemas ante las autoridades de competencia que deben aprobar la operación. La comisaria europea Neelie Kroes advirtió de que examinará cuidadosamente la opa.
Para solucionar este aspecto en Estados Unidos, Mittal ha completado su oferta con un acuerdo con ThyssenKrupp, a la que vendería la canadiense Dofasco, con la que Arcelor ya había cerrado un pacto de compra tras una dura pugna con la alemana. El precio que pagará Thyssen será el de su última oferta, que era 2,1 euros por acción más bajo que el ofrecido por Arcelor. Los alemanes expresaron su satisfacción por esta alianza.
Sin embargo, la alegría va por barrios. Cuando los gestores de Arcelor estimaban que la compañía ganaba músculo con la compra de Dofasco, sentaban las bases para evitar operaciones de control no deseadas y les iba a permitir afrontar nuevas operaciones corporativas han tropezado con la oferta de Mittal. El consejo de la siderúrgica con sede en Luxemburgo calificó la estrategia de la firma anglo-india de 'hostil' ya que se ha realizado 'sin que haya existido conversaciones o consultas entre ambas sociedades previas a la presentación de la oferta'. El máximo órgano de gobierno tiene previsto reunirse en los próximos días para determinar su postura antes esta oferta.
Fuentes del sector y financieras consultadas dan por seguro el rechazo del consejo de Arcelor a la propuesta de Mittal, que valora los títulos de la compañía en 28,21 euros. Estos medios aseguran que su argumentación se puede centrar en que el grueso de la oferta (75%) se instrumenta a través de intercambio de acciones y que sólo un 25% restante es contraprestación en metálico, a pesar de que Mittal está dispuesto a pagar una prima del 27%. Con esta composición, el desembolso máximo que supone la opa es de 4.700 millones de euros frente a la propuesta global de 18.600 millones.
Para Lakshmi Mittal, sin embargo, la oferta supone una prima atractiva para los accionistas de Arcelor y les permitirá beneficiarse del fuerte incremento de la demanda mundial del acero. Mittal dijo no tener planes para mejorar el precio de la opa, aunque no descartó la posibilidad.
Las plantas españolas encajan en su estrategia de negocio
Buenas intenciones en situaciones de compromiso. Los primeros mensajes lanzados por los responsables del grupo Mittal Steel dan un margen de confianza a las plantas propiedad de Arcelor que se encuentran repartidas por buena parte de la geografía española. Es decir que las factorías situadas en lugares cercanos a la costa tienen más futuro que las continentales. Y, en España, el grueso de la actividad productiva del todavía grupo siderúrgico con sede en Luxemburgo se concentran en Asturias, País Vasco y Levante. Las reacciones sobre el posible papel que jugará la división española de Arcelor, la antigua Aceralia, y la repercusión de la oferta de Mittal no se hicieron ayer esperar. Así UGT desaprobó la propuesta de la compañía anglo-india porque se ha planteado de 'forma hostil' y mostró su preocupación sobre el posible impacto en el empleo. CC OO aseguró que de las fusiones 'salen reducciones de plantilla'.
Reacción eufórica en Bolsa para los dos valores
Que Arcelor se disparase ayer en Bolsa tras la opa entraba dentro del guión. Que también lo hiciese Mittal es la mejor prueba de que el mercado apuesta por el éxito de la operación y considera que crea valor.La euforia inversora llevó a Arcelor a escalar un 28% en la mayor subida de su historia. La siderúrgica llevó al Ibex en volandas por encima de los 11.000 puntos. Mittal ofreció 0,8 acciones propias más 7,05 euros en metálico por cada título de Arcelor, lo que suponía valorar la acción de esta última en 28,21 euros. Ese precio representa una prima del 27% sobre la cotización de cierre del jueves que ya suponía un máximo histórico. La prima es del 31% sobre el precio medio del último mes y del 55% sobre el del último año.El ascenso de Arcelor llevó la acción hasta 28,52 euros, esto es, por encima del precio al que se formulaba la opa. Pero al ser el 75% de la oferta en acciones, la subida del 6,15% de la propia Mittal Steel (un valor mucho menos líquido que Arcelor) ha supuesto una mejora inmediata de la contraprestación. Así, con las acciones de Mittal a 27,63 euros, la oferta queda valorada en 29,15 euros por cada título de Arcelor, algo por encima de la cotización actual.El aumento de valor en Bolsa agregado de las dos compañías rondó ayer los 5.000 millones de euros. Lo habitual es que haya un trasvase de valor de la empresa opante a la opada. Esta vez, ambas subieron.