Mickey Mouse quiere recuperar a sus socios de 'Toy Story'
Disney no quiere perder su más lucrativo aliado. Durante meses, ambos grupos han buscado soluciones para mantener su acuerdo en el sector de los dibujos animados, que termina en junio de 2006 con el estreno de Cars, la última película de animación producida conjuntamente. Ahora, parece que Disney y Pixar están negociando la compra del estudio por parte de la compañía mediática internacional, según publicó ayer el periódico Wall Street Journal.
Conforme a las supuestas condiciones del acuerdo, Disney pagaría una pequeña prima sobre el valor actual del mercado de Pixar, que se sitúa en 6.700 millones de dólares (unos 5.540 millones de euros). El contrato sería una transacción de acciones. La operación convertiría al presidente de Pixar y de Apple Computers, Steve Jobs, en el accionista más fuerte de Disney y podría entrar a formar parte del consejo de administración de la empresa, informa el diario estadounidense.
Sin embargo, las dos compañías aún están negociando y es posible que se decanten por otras opciones, como un acuerdo por el que Disney simplemente distribuiría las películas financiadas y realizadas por Pixar.
Relación de 12 años
Ambas empresas han sido socias durante más de 12 años. Disney ha distribuido y cofinanciado las más populares y rentables producciones de Pixar, incluyendo Toy Story, Los increíbles y Buscando a Nemo. Sin embargo, hace dos años Steve Jobs comunicó que tenía intención de terminar la relación con Disney cuando el contrato expirara en 2006 y buscar un nuevo socio distribuidor. Los enfrentamientos con el entonces presidente ejecutivo de Disney, Michael Eisner, causaron la ruptura de las relaciones.
Una de las prioridades que fijó el nuevo presidente de Disney, Robert Iger, al asumir el mando de la compañía en octubre, fue restablecer las relaciones con sus socios. Prueba del acuerdo de paz con Jobs, o como tal se percibió según el Wall Street Journal, fue la iniciativa de Iger de que programas de Disney como Perdidos o Mujeres desesperadas estuvieran disponibles para descargar y reproducir en el iPod de Apple.
Las acciones de Pixar alcanzaron su máxima cotización el pasado 4 de enero, cuando comenzaron las especulaciones sobre la posible venta de los estudios a Disney. Los títulos llegaron a subir ayer en Bolsa un 3%.
Disney tiene que hacer frente a esta revalorización de la empresa a la hora de fijar los términos del acuerdo, pero la compra le aseguraría el productor más exitoso de dibujos animados, principal prioridad de la empresa de entretenimiento, según su presidente Robert Iger. Disney fue durante décadas líder de la industria de dibujos animados, hasta la entrada de los ordenadores en la animación.