Un dictamen poco motivado
El Tribunal de Defensa de la Competencia (TDC) hizo pública ayer su opinión acerca de la opa de Gas Natural sobre Endesa. Un dictamen que propone que se declare improcedente la operación. La argumentación acerca del impacto de la operación sobre la competencia parece bastante sólida. No lo es tanto, sin embargo, la tesis de que no resulta posible asegurar que ningún conjunto posible de condiciones pudiera compensar 'los daños de carácter irreversible' que, en su opinión, conlleva la operación. Esa negación sorprende en un tribunal que fue capaz de encontrar acomodo a la fusión de Endesa e Iberdrola.
Entonces, el tribunal también consideró que la operación deterioraba 'gravemente las condiciones de competencia del mercado', pero entendió que existían 'soluciones de desinversión' para asegurar la competencia efectiva y, al mismo tiempo, respetar el ejercicio de la libertad de las empresas decididas a fusionarse.
El escaso análisis de las condiciones posibles llevado a cabo en esta ocasión por el TDC choca con la doctrina del Tribunal Supremo, según la cual 'es menos restrictiva con la libertad de empresa la aprobación con condiciones que el rechazo frontal de la operación', pues esta última solución sólo 'cabe acordarla cuando a través de las condiciones sea imposible compensar los efectos restrictivos de la competencia'.
El Gobierno tiene ante sí el informe de la Comisión Nacional de la Energía -que propugna una aprobación condicionada- y el dictamen de Competencia. æpermil;ste incluye un voto particular discrepante que propugna que el Gobierno exija a Gas Natural que se comprometa a aceptar una serie de condiciones antes de pronunciarse. De no existir ese compromiso previo, también los tres vocales que quedaron en minoría son partidarios de que se prohíba la operación. Si el Gobierno autorizase la opa parece, pues, razonable que se exijan dichas garantías.