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Integración

Los inmigrantes, oportunidad laboral para las empresas

El INE calcula que en España faltarán trabajadores en 2015. La solución es aprovechar adecuadamente el flujo migratorio

Las previsiones del Instituto Nacional de Estadística (INE) indican que el crecimiento económico español será constante en los próximos años: en 2013 se alcanzará el pleno empleo y dos años más tarde habrá un déficit de 800.000 trabajadores. Y en esa situación de escasez de profesionales, debida a la baja tasa de natalidad de los españoles, las personas provenientes de otros países se van a convertir en un colectivo de suma importancia. Serán no sólo necesarios, sino imprescindibles.

æpermil;sta es una de las conclusiones principales del libro Inmigración y empresa. El desafío empresarial de la inmigración, guía para el ejecutivo, coordinado por Alfonso Jiménez, Miriam Aguado y Manuel Pimentel y en el que se considera que la evolución futura del mercado laboral y el sostenimiento del sistema de pensiones dependerán, en buena medida, de los inmigrantes. La tarea de las organizaciones será saber adaptarse a un proceso de cambio relativamente drástico y convertir la integración en un fenómeno natural.

Los extranjeros representaban en diciembre de 2004 (los datos son también del INE) el 7,6% de la población española y el 6,5% de la población activa, y cada vez serán más. El Observatorio de Demografía y Mercado Laboral de PeopleMatters, empresa especializada en gestión de personas, concluye que en 2010 la cifra puede llegar a alcanzar el 20%. Y, aun así, en los años siguientes no bastarán para cubrir las ofertas de empleo. Con este panorama, son normales reflexiones como la del profesor del IESE José Ramón Pin en el Libro blanco sobre las mejores prácticas para la integración del trabajador inmigrante en las empresas españolas (2004): 'Necesitamos a los inmigrantes, los necesitamos para cubrir puestos de trabajo que de otra manera estarían vacantes e improductivos. Los necesitamos para que coticen en nuestro sistema de Seguridad Social e, incluso, los necesitamos para cuidar de nuestros niños, de nuestras casas y de nuestros mayores'. Los extranjeros hacen falta ya, en la actualidad, y no sólo en el futuro. Especialmente en algunos sectores. El director de recursos humanos de Grupo Eulen, Alfonso Gordon, empresa dedicada entre otras cosas a la limpieza y al mantenimiento, explica la situación: 'Hay necesidad de mano de obra por varios fenómenos sociales. España es un país que crece económicamente, y los españoles tienen unas expectativas laborales cada vez más altas, por lo que las empresas de los sectores primarios tenemos dificultades para encontrar gente. Nos rechazan'. La solución es buscar trabajadores entre los inmigrantes, que se decantan por el sector servicios (63%) antes que por la construcción (18%), la agricultura (12%) y la industria (9%). Y, después, lograr que se integren sin problemas.

Las diferencias

'æpermil;ste es un fenómeno que ha producido cambios sociales notables', reconoce Gordon, que destaca la importancia de saber gestionar la diversidad: 'Tenemos que ser conscientes, por ejemplo, de que nos dirigimos a personas con otra cultura, y que debemos ser flexibles con ellas. Y desde el punto de vista formativo hay que saber adaptarse. Por poner un caso real, hemos dado cursos de formación a gente que no sabía qué era una escoba porque en su país no se usan; y hay gente que no mide en metros, sino en yardas. Las empresas tendremos que aprender y ser dinámicas. Pero no es algo tan drástico, en nuestro grupo hay muchas nacionalidades y no tenemos grandes problemas'.

El director de recursos humanos del Grupo Vips, Miguel Ángel García, sostiene también que en su empresa la integración se ve con normalidad. 'A los extranjeros sólo les pedimos que cumplan con su trabajo, lo demás no nos importa', asegura, y destaca que la mayor diferencia con los profesionales españoles es que 'tienen una ilusión y unas ganas de progreso' superiores porque 'vienen de países en los que las dificultades son muy grandes'. 'A veces se nos olvida que hace 40 años nuestras familias fueron emigrantes', dice.

Casos particulares. Los extranjeros como un foco de recursos humanos

grupo eulenEl director de recursos humanos del Grupo Eulen, Alfonso Gordon, asegura que los inmigrantes no son una necesidad para las empresas, sino 'una oportunidad de negocio'. Hace dos años, en la plantilla dedicada a la limpieza dentro de esta compañía (15.045 personas) había un 3,2% de inmigrantes; en 2005, de 15.900 el 5,3% eran extranjeros. Su presencia ha crecido casi un 77% desde 2003, mientras que el número de empleos ha aumentado en un 6%. La razón no es que los inmigrantes sean mano de obra barata ('pagamos exactamente lo mismo que a un español'), sino que muchos españoles no quieren trabajar en la limpieza. En cuanto a la integración, Gordon no encuentra problemas a pesar de contar con más de 70 nacionalidades.capraboEsta empresa de distribución no tiene una 'política específica para captar población inmigrante', según su directora de organización y desarrollo, Vera Baena, pero el 8% de sus 19.000 empleados han llegado de fuera de España. 'Nuestra política es la no discriminación', añade, y asegura a la hora de trabajar con inmigrantes no existen diferencias. 'La integración es correcta. La única salvedad que hacemos es que si la persona no domina el idioma se incorpora en centros logísticos y no atiende al público', explica. Una de las ventajas de los inmigrantes como empleados, señalada por algunos expertos, es su disponibilidad para moverse por España. 'Pero eso depende de las circunstancias', matiza Baena. 'Si tienen aquí su familia, les cuesta'.grupo vipsEn esta empresa hostelera, el 54% de los 8.600 empleados son extranjeros. Desde 1999, la compañía ha creado casi 4.000 puestos de trabajo, pero 'esos empleos no han sido atractivos para los españoles', explica el director de recursos humanos, Miguel Ángel García. 'Necesitamos personas, por eso recurrimos a las de otros países', que en 1999 representaban el 9% de la plantilla. 'No tenemos problemas de integración a pesar de que en la empresa hay 88 nacionalidades diferentes. Es un fenómeno absolutamente natural. La clave es la igualdad de oportunidades: el 41% del equipo gerencial no es de nacionalidad española. Quien llega aquí ve que se valora a las personas y no la nacionalidad', añade García.

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