El Estado sólo había ejecutado en noviembre el 61% de sus inversiones
La Administración central había ejecutado hasta el 30 de noviembre sólo el 60,6% de las inversiones previstas para 2005 hasta totalizar 5.566 millones de euros. A falta de computar los datos de diciembre (se conocerán a finales de enero), quedan aún por formalizar compromisos hasta 9.180 millones entre los diferentes ministerios.
El bajo grado de ejecución de las inversiones reales del Gobierno central contrasta con la buena situación financiera de las cuentas públicas. De hecho, se espera que el Estado central haya obtenido, por primera vez en la historia de la democracia, superávit entre ingresos y gastos, una vez computadas las cifras a cierre de 2005.
La razón que esgrime la administración para este atraso en las inversiones no es, como parece evidente, la de tener dificultades de financiación para sacar adelante las obras previstas. El argumento pasa, sencillamente por 'razones de calendario', en un tipo de gasto que 'tradicionalmente se concentra' en los últimos meses del año.
Fuentes del Ministerio de Hacienda, encargado de vigilar la ejecución presupuestaria a través de la Intervención General del Estado, intentan tranquilizar los ánimos ante esta situación, señalando que confían en que, cuando a finales de enero se presenten las cifras de cierre del año 2005, 'el porcentaje se asemeje, al menos, al de ejercicios anteriores', en los que se superó el 90% de media.
Pero lo cierto es que desde la Secretaría de Estado de Hacienda y Presupuestos, que dirige Miguel Ángel Fernández Ordóñez, se han ido dictando instrucciones en los últimos días de 2005 para acelerar el proceso en todos los departamentos ministeriales, en un tipo de gasto que se considera prioritario en la política económica del Ejecutivo por su efecto multiplicador para el crecimiento económico.
Hasta octubre, la ejecución de las inversiones se situaba en un grado mucho menor, sin llegar a la mitad de lo previsto (48,1%). En noviembre, la situación mejoró en algunos ministerios como el de Fomento, el más inversor. De hecho, en el departamento que dirige Magdalena Alvarez, se pasó del 53% al 71% de ejecución en un sólo mes. Ayudó la firma del convenio pendiente con el ADIF para la administración de infraestructuras del Estado, por valor de 463 millones. Sin embargo, este ejemplo no ha cundido en otros ministerios.
Defensa, con sólo el 53% de ejecución está entre los más atrasados, teniendo pendiente aún a 30 de noviembre mil millones de euros en inversiones sobre los créditos asignados. Algo similar pasa con Medio Ambiente (57,8%), ministerio que ejecuta obras a través de las sociedades de aguas. Además, Hacienda reconoce que 2005 se cerrará contablemente con una menor ejecución en activos financieros ligados a inversión en I+D, una modalidad de crédito empresarial que no está teniendo el éxito previsto.
Aparte de razones del calendario, fuentes de la administración admiten a Cinco Días que la mecánica administrativa (papeleo) tiene también mucho que ver con esta situación de atraso en la ejecución. La ley obliga a que se sucedan las autorizaciones de varios departamentos, en una complejidad tal que no se autorizan pagos hasta final de año. Esta situación, común en esta Legislatura y en los anteriores Gobiernos del PP, ha provocado que siempre quede un remanente sin utilizar. En 2004, aún con el 94% de las inversiones realizadas quedaron sin ejecutar obras por 500 millones de euros (más de 80.000 millones de las antiguas pesetas), y gastos en general, por 4.000 millones.
Pendientes 3.500 millones en Educación e Industria
El retraso en la ejecución de gastos no sólo se circunscribe a las inversiones. Aunque el grado medio de realización de todo el gasto del Estado hasta el 30 de noviembre se encuentra en el 84% (medido en obligaciones sobre créditos totales), hay departamentos que se encuentran muy retrasados sobre la media. El Ministerio de Educación y Ciencia, por ejemplo, cuenta con una ejecución todavía del 60%, y el de Industria, Turismo y Comercio, se encuentra en el 59%. Entre ambos ministerios están pendientes aún gastos por 3.500 millones.En la administración de justicia también se encuentran algo retrasados, especialmente en el Consejo General del Poder Judicial y el Consejo de Estado.
Gastos plurianuales previstos de 400.000 millones hasta 2031
La Intervención General de la Administración del Estado funciona como un reloj a la hora de programar gastos de carácter plurianual, cada vez más frecuentes por el alto coste de las infraestructuras y otras inversiones.El Estado central tiene ya previstos gastos hasta el año 2031, por valor de 409.957 millones de euros, de los que un 25% se consignarán entre 2006 y 2007. La mayor parte corresponde al servicio de pago de intereses de la deuda pública y emisión de nuevos títulos.Otros pagos comprometidos son inversiones de diferente tipo como las previstas para el desarrollo del plan de infraestructuras terrestres (PEIT), que coordina Fomento, y que supondrá extender la alta velocidad ferroviaria por todo el país.