_
_
_
_
CincoSentidos

Fumadores en la calle

Sanidad cree que el número de adictos caerá un 10% en 2006 gracias a la ley antitabaco, mientras las compañías empiezan a regular el descanso para fumar

Ayer era día de estreno en todos los centros de trabajo. Las paredes de las oficinas, fábricas o talleres aparecieron repletas de carteles que recordaban la prohibición de fumar y estaban clausuradas las salas habilitadas para tal menester en aquellas empresas donde se habían adoptado zonas especiales para fumadores. Desde ayer, los ceniceros están prohibidos en los centros de trabajo y en el mejor de los casos los adictos al tabaco cuentan con manga ancha para abandonar sus sedes y encender un cigarrillo en la calle. Aunque todo apunta hacia la regulación vía convenios colectivos de estas escapadas.

Endesa, por ejemplo, ha prohibido a su plantilla concentrarse en la puerta de las oficinas centrales de Madrid, aunque no se opone a que sus trabajadores salgan a fumar. La dirección de la eléctrica esgrimía días atrás en una nota interna cuestiones de imagen para aplicar la medida. Sin embargo, en la sede de una gran multinacional sí se podía ver a sus empleados fumando en la puerta. 'No nos hemos planteado prohibir estas escapadas, aunque es cierto que no da buena impresión que decenas de personas se agolpen ante la entrada con el cigarro en la boca', dice el portavoz oficial de la compañía que prefiere no ser citada.

Distintas empresas reconocieron ayer cierta indulgencia con los fumadores que salían a la calle. Entienden que muchos no puedan reprimir el impulso y aconsejan que los adictos al humo acudan cuanto antes al consejo de un médico.

Telefónica es una de las que ha puesto medios al alcance de sus trabajadores para que se olviden del pitillo, pero también ha impuesto ciertas normas. De hecho se insta a los fumadores a que aprovechen 'el descanso intermedio previsto en el artículo 107 de nuestra normativa laboral' para salir a la calle en busca de la ansiada bocanada de humo.

El servicio médico de Telefónica comenzó a diseñar en marzo una campaña contra el tabaco en la que se incluyen consejos prácticos, un test de hábito tabáquico y un curso para plantar cara a la nicotina. 'Tenemos 300 alumnos desde octubre a los que recomendamos que hagan público un plazo para dejarlo', aconseja la doctora Conchita Martín Bustamante desde Telefónica de España, donde un 30% de la plantilla se reconoce adicta al tabaco. Bajo su punto de vista, una horquilla razonable para dejarlo va de diez a 60 días.

El reto marcado por el Ministerio de Sanidad es que el número de fumadores caiga un 10% durante el primer año de aplicación de la Ley que regula la venta, consumo y publicidad relacionada con el tabaco. El Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) reveló en un reciente informe que un 25,8% de la población fuma. Pero las empresas españolas no están entre las que han venido soportando ambientes más viciados.

Un 15% fuma en la empresa

15 de cada 100 trabajadores de este país reconocen consumir tabaco en sus lugares de trabajo, según un estudio de la firma de recursos humanos Kelly Services. Esta cuota sitúa a España al nivel de Rusia y Reino Unido y por debajo de Francia (23%), Italia y Alemania (22%). 'Nuestra empresa implantó las restricciones a principios de los 2000 y la cifra de fumadores ha caído en picado. Con la entrada en vigor de la nueva ley ya no se fuma en ningún rincón de la sede, pero tampoco se impide al personal que salga a la calle', cita un portavoz de IBM, 'aquí no se mide la productividad por horas sino por el cumplimiento de los objetivos, por lo que no hay un estricto control de entradas y salidas'. De igual modo, aún no existe regulación en la ciudad financiera del Santander, en la localidad madrileña de Boadilla: 'No se puede fumar dentro, pero nadie impide que se salga', exponen desde el departamento de relaciones externas.

Un 60% de los encuestados por Kelly Services en España cree que no resulta excesivo la prohibición de fumar en los cetros de trabajo. Aunque no se preguntó en la encuesta por el espíritu sancionador del texto, con multas entre 30 y 601 euros para las faltas leves y hasta 10.000 euros para los reincidentes.

Para evitar conflictos en la aplicación de la que ya se conoce como Ley antitabaco, UGT aboga por la implantación de normas internas en cada empresa que garanticen los derechos de los fumadores. 'El tabaquismo es una drogodependencia y como tal debe tratarse', sostiene el sindicato. Las fórmulas para evitar que los trabajadores enganchados al humo se sientan discriminados son, a juicio de UGT, el diálogo, las medidas para difundir los riesgos del tabaquismo, tratamientos médicos y 'regular las pausas para aquellos que no puedan o no deseen dejar de fumar'.

Los focos de polémica tuvieron ayer más relación con la política que con el mundo de la empresa. El primero estuvo en Logroño, donde el grupo socialista del ayuntamiento denunció la pasividad del PP a la hora de hacer cumplir la ley. Mientras, el gobierno Balear, también popular, se empeña en aplicar una ley autonómica aprobada hace seis meses y no la que entró en vigor el 1 de enero.

La ayuda nunca sobra

¦bull; Vida sin tabaco

El Hospital Carlos III de Madrid tiene un tratamiento gratuito que puede seguirse de forma presencial, por teléfono o a través de www.vidasintabaco.com. Fuentes sanitarias aseguran que el 60% de los participantes deja de fumar en menos de seis meses.

¦bull; Línea de sanidad

El Ministerio de Sanidad atendió ayer numerosas dudas sobre la aplicación de la ley en el teléfono 901 445 445. La web www.msc.es incluye una guía para abandonar el tabaco.

Debate: ¿Límites a un derecho?

Al 15,5% de los españoles les ha sentado mal la prohibición de fumar en lugares cerrados de trabajo, frente a un 77,2% que opinan que la medida es positiva.La foto del estado de opinión fue realizada en noviembre por el CIS. De su encuesta se desprenden dos puntos para la reflexión: una mayoría (53,5%) cree que fumar es un derecho que no se debe limitar, y son muchos (69,3%) los que piensan que será difícil que el público obedezca la ley. El Secretario General de Sanidad, José Martínez Olmos, fue optimista ayer al declarar a Efe que los fumadores afrontan la ley como una oportunidad para olvidar el tabaco.

Newsletters

Inscríbete para recibir la información económica exclusiva y las noticias financieras más relevantes para ti
¡Apúntate!

Más información

Archivado En

_
_