El alumno 'online' estudia de noche, trabaja y tiene 29 años
La mayoría de los estudiantes eligen los cursos por interés personal y profesional
Las personas que se forman por medio de internet no se dedican a tiempo completo al estudio: el 88% de ellas está también trabajando. Así lo asegura el informe Formación a distancia 2005, del Centro de Estudios Financieros (CEF), que determina que el alumno tipo es una persona de entre 28 y 31 años que usa habitualmente internet y que, normalmente, estudia entre las ocho de la tarde y las once de la noche.
Según Arturo de las Heras, subdirector del CEF, 'hoy por hoy existe un perfil muy definido del estudiante en la modalidad on line'. Se trata de personas que han crecido con las nuevas tecnologías. 'Y, por tanto, están muy habituados al uso del ordenador y de las posibilidades de internet. Los usan para trabajar y para su ocio, por eso no tienen ningún problema a la hora de volcar también sus necesidades formativas hacia este formato. Por un lado están familiarizados con el medio y, por otro, éste se adapta muy bien a sus necesidades de tiempo y dedicación'.
Estas personas son los 'usuarios naturales' de la formación a distancia, sobre todo cuando se trata de estudios de posgrado. Sin olvidar otras posibilidades de negocio, éste es el perfil que las empresas especializadas deben explotar en un momento crucial para el sector. 'Estos alumnos son el motor que ya permite que la formación on line empiece a adquirir entidad en nuestro país', asegura De las Heras.
No obstante, la formación virtual muestra más pujanza en las grandes empresas y en las instituciones públicas que entre los particulares. El estudio La demanda de formación continua en España 2004-2005, de DEP Consultoría Estratégica, establece que 200.000 personas en España realizan su actividad de formación continua sólo a través de internet y 112.000, de forma semipresencial. Estos datos representan el 11,5% de la formación continua en España y, a su vez, se reciclan permanentemente sólo el 10,2% de los españoles.
Por el contrario, en El e-learning en la Administración pública y en la gran empresa España 2005, informe elaborado por Santillana Formación, se asegura que un 80% de las organizaciones van a contratar servicios de formación a distancia en un futuro próximo. Los datos son peores cuando se habla de compañías más modestas. Un estudio de la Asociación de Proveedores de e-learning señala que sólo un 0,2% de las pymes y un 7,2% de las organizaciones con más de 200 trabajadores utiliza internet.
Respecto a los estudiantes particulares, Arturo de las Heras llama la atención sobre las causas que llevan a los alumnos a decantarse por un curso en la red. El estudio del CEF indica que el 63% de las personas que se deciden por estudiar a distancia eligen los contenidos del curso 'por sus propios intereses personales'. El 45% de los encuestados señala también las 'necesidades en el desempeño de su trabajo' como una causa relevante, mientras que el reciclaje profesional lo citan el 42% de los estudiantes.
Motivación
'Llama la atención el hecho de que el interés figure por encima de las causas más relacionadas con el trabajo en cuanto a las motivaciones de los alumnos, aunque por lo general son motivos complementarios', destaca el subdirector del CEF. 'Esto revela muy a las claras que los alumnos de la formación a distancia tienen en muy alta consideración su propio desarrollo personal y profesional, con una perspectiva a largo plazo, más que a corto'. Es precisamente ésta su principal motivación, por encima del desempeño de un determinado puesto de trabajo en un momento dado. 'Lo que aprendan en el curso les será útil para su actual trabajo, pero sobre todo, les permitirá crecer como profesionales y como individuos'.
Pero, en este estudio, 'interés personal' no se identifica exactamente con ocio o tiempo libre. 'No es que a nuestros alumnos les apetezca saber derecho laboral, sino que el gusto personal va mezclado con lo profesional', matiza De las Heras.
Crecimiento. El negocio está en la empresa
El subdirector del Centro de Estudios Financieros, Arturo de las Heras, considera que el sector puede crecer gracias a los jóvenes que estudian en el puesto de trabajo porque las empresas les dan horas al día para dedicarlas al reciclaje. 'En la formación no ocupacional el crecimiento es más difícil', asegura De las Heras.El informe del CEF certifica que el e-learning puede tener una oportunidad de expansión en el mundo empresarial. 'Los alumnos, que son profesionales, suelen aprovechar las tutorías para recibir asesoramiento, para tener una segunda opinión', comenta De las Heras.Santillana Formación maneja datos que dan razón a estas tesis: el 45% de las grandes empresas y Administraciones públicas destinan más del 10% de su presupuesto de formación a la formación on line. Lo hacen por las posibilidades de ésta 'de llegar a a la gente, por su flexibilidad y por su interactividad', dice el responsable de estudios y análisis de mercados de Santillana Formación, Pablo Martín.Además del sector laboral, la formación virtual debe aprovechar las posibilidades de expansión desde el nivel más básico: la educación básica. 'El e-learning puede crecer en los colegios. Por ejemplo, con las tareas, que podrían hacerse desde casa. Por otra parte, los alumnos ya han empezado a utilizar internet para documentarse', dice De las Heras.