Rusia y China emprenden medidas para simplificar las salidas a Bolsa
Los Gobiernos de Rusia y China aprobaron ayer sendas leyes con el objetivo de facilitar los procesos de la salida a cotización y estimular así la actividad inversora en los mercados bursátiles.
Apertura de los mercados de valores en los antiguos baluartes del comunismo. El Gobierno de Vladimir Putin aprobó ayer un paquete de medidas legales para acortar los procesos de salida a Bolsa y reducir las trabas burocráticas. Paralelamente, la Administración china dio luz verde a una norma que elimina el requisito de la autorización preceptiva gubernamental que hasta ahora debían solicitar las empresas que quisieran cotizar en Shanghai. Las reformas aprobadas por los dos países entrarán en vigor a partir de enero.
En el caso ruso, las compañías tendrán 20 días para fijar el precio de la OPV, en lugar de los 45 fijados hasta ahora. De la misma manera, las acciones podrán empezar a cotizar inmediatamente después de que se haga efectiva la colocación, en lugar de tener que esperar un mínimo de 14 días a que los reguladores aprobasen el resultado de la salida a Bolsa. Por último, el Ejecutivo también ha eliminado el limite de revalorización del 11% que podían subir en un sólo día los títulos, una vez que los accionistas habían fijado un nivel inicial.
A pesar de que el índice RTS de la Bolsa de Moscú ha subido un 82,7% este año, los empresarios rusos han vendido en los mercados extranjeros acciones por más de 6.000 millones de dólares, todo con el objetivo de evitar el farragoso sistema ruso de OPV.
En China, ya no será el Gobierno el que paralice o autorice una venta de acciones en la Bolsa de Shanghai, sino que esta facultad residirá en el propio mercado. El ejecutivo también ha aprobado una ley para fortalecer los derechos de los accionistas a la transparencia de las empresas en las que invierten. El mercado Shanghai pierde en el año un 7,6%.
El Banco de China completa los preparativos para salir a cotizar
El mayor prestamista en moneda extranjera de China, Bank of China, presentará en breve el folleto para salir a cotizar en Hong Kong, según informó ayer el diario China Securities Journal. Se espera que sea una OPV multimillonaria, del mismo calado que la de China Construction Bank, que en octubre pasado sacó a Bolsa casi 6.400 millones de euros en la que fue la mayor salida a Bolsa en el mundo en cuatro años. Pese a las medidas de flexibilización adoptadas por el Gobierno chino, los pesos pesados del país siguen optando por Hong Kong a la hora de desembarcar en Bolsa.