Los subsidios agrícolas dificultan un pacto en la OMC
La cumbre de la Organización Mundial del Comercio arranca en Hong Kong con expectativas rebajadas. Los países en desarrollo piden a la UE que mejore su oferta de acceso a su mercado agrícola, pero el comisario Mandelson exige contrapartidas en los ámbitos industrial y de servicios.
La esperada cumbre de Hong Kong, que durará hasta el domingo, arranca hoy con expectativas mucho más bajas que hace pocos meses. La reunión ministerial de los 148 países de la Organización Mundial del Comercio (OMC) tenía entonces como objetivo cerrar dos tercios del marco multilateral de relaciones comerciales de la llamada ronda de Doha. Las sucesivas decepciones en las ofertas de los países miembros han llevado esperar un acuerdo de mínimos: es difícil que la cumbre sea un éxito, y sólo se espera que no sea un fracaso para que a lo largo del año próximo pueda cerrarse la ronda.
Lo que está en juego, según el Banco Mundial, es mucho: la consecución de un marco de libre comercio como el que se negocia en la ronda de Doha podría elevar el PIB mundial en 300.000 millones de dólares anuales y sacar de la pobreza a cerca de 140 millones de personas. Pero la consecución de tan loables propósitos depende de cesiones para las que los grandes bloques comerciales comerciales alegan tener poco margen de maniobra.
Hasta hoy, el grueso de la negociación se ha centrado en el ámbito agrícola, donde las ayudas internas de Europa, Estados Unidos y Japón suponen, junto a las tarifas aduaneras, una barrera difícil de franquear para los países en desarrollo. EE UU inició la subasta de ofertas en octubre, al proponer una reducción media de sus tarifas del 75%. De momento, la mejor respuesta de la UE pasa por eliminar los subsidios a la exportación, reducir en un 70% las ayudas internas que distorsionan el comercio y rebajar las tarifas cerca del 39%.
Buena parte de las medidas que ofrece Europa fueron adoptadas hace dos años, en el nuevo marco de la Política Agrícola Común (PAC). Pero la oferta no es suficiente para los intereses de Estados Unidos ni, sobre todo, del G-20. Este grupo de países emergentes, liderado por China, Brasil e India, exige más apertura antes de hablar de liberalizar la industria o los servicios. El atasco negociador está servido, porque el comisario europeo de Comercio, Peter Mandelson, ha pedido que estos países muevan ficha si quieren que la UE mejore su oferta agrícola. El margen de Mandelson es estrecho, porque Francia ha llegado a amenazar con vetar un acuerdo que recorte la recién reformada PAC. El comisario sostiene, por otra parte, que una apertura más amplia del mercado agrícola cercenaría los privilegios que la UE ofrece a los países más pobres en favor de potencias emergentes como Brasil. Dos tercios de las exportaciones agrícolas de los 50 países más pobres tienen por destino la UE, gracias al programa preferencial aprobado en 2001.
En el otro lado del Atlántico, el subsecretario del Tesoro de EE UU para asuntos internacionales, Timothy Adams, declinó ayer concretar lo que sería un resultado satisfactorio en la cumbre, informa Ana B. Nieto. En un encuentro con la prensa extranjera en Nueva York, Adams evitó especificar objetivos para una cumbre 'extremadamente importante para el desarrollo'. 'Entre 300 y 500 millones de personas en los países más pobres se verán beneficiadas si se cierran las negociaciones con éxito', afirmó.
EE UU se presenta a esta ronda ofreciendo algunos planes regionales de eliminación de cuotas y tarifas a la exportación a varios países de África y América del Sur que no hace extensivo a todo el mundo para evitar verse inundado por productos baratos que compitan con los nacionales, especialmente en el sector textil. La presión para lograr un acuerdo antes de fin de 2006 es alta, porque la autorización que el Congreso, mayoritariamente proteccionista, otorgó a George Bush para negociar expira en junio de 2007.
18 millones de firmas
No está claro si en Hong Kong se repetirán las manifestaciones antiglobalización que se iniciaran en la cumbre de Seattle (1999). De momento, el inicio de la cumbre de Hong Kong ha estado marcado por la entrega a Pascal Lamy, presidente de la OMC, de 17,8 millones de firmas en defensa de un comercio justo reunidas por la ONG Oxfam.
Las posturas de partida
Unión EuropeaPeter Mandelson, comisario de ComercioHa ofrecido recortes de subvenciones y tarifas agrícolas en el marco de la reforma de la PAC de 2003. Para ir más allá, exige contraprestaciones en forma de acceso a mercados de industria y servicios.Estados UnidosR. Portman, representante de ComercioOfrece una rebaja del 75% en las tarifas agrícolas. La UE le pide que elimine todas las tarifas y cuotas para los países más pobres, pero Portman aclara que sólo se hará 'dentro de los programas existentes'.G-20Celso Antorim, ministro brasileñoEl titular de Exteriores de Brasil, el país en vías de desarrollo que lleva la voz cantante en la negociación, afirmó ayer que 'salvo que la UE mejore sustancialmente su oferta en bienes agrícolas, no habrá una ronda exitosa'.