TPI planta cara a Google con un buscador propio
Después de un año y medio de desarrollo e investigaciones, TPI lanza hoy la versión precomercial de su buscador generalista. La tecnología es propia y su ambición, competir con Google por el mercado español, en un primer estadio, y por el latinoamericano, en una fase posterior. Sus armas son los contenidos locales y la rapidez.
Ni Terra ni Telefónica. Al final ha sido TPI, la editora de las Páginas Amarillas, la que ha desarrollado un buscador propio fruto de la apuesta de esta compañía por la diversificación y la constante búsqueda de fuentes alternativas de ingresos.
La decisión de lanzarse al competitivo mercado de los buscadores nació en TPI más o menos en el momento en que Terra jubilaba en estas funciones a Lycos y fichaba a su archirrival Google. Fue hace un año y medio, con el argumento de que en ese sector la tecnología propia resultaba cara y había que unirse a los líderes.
Los hechos demuestran que TPI no está de acuerdo. La filial de Telefónica cree que puede aportar mucho a ese mercado, hasta el punto de convertirse con Noxtrum -el nombre elegido para el buscador- 'en el mayor generador de tráfico de búsquedas y encuentros; que sea el preferido de los usuarios', explican fuentes de la compañía. Por supuesto, el tiempo y el dinero invertidos en crear el buscador propio intentarán ser recuperados, así que el producto no se quedará para consumo interno ni para complementar la oferta de TPI. Allí estará, pero también se intentará vender a terceros -cuando finalice la actual fase precomercial abierta al público-, con la intención de que 'esté en todos los portales'.
TPI ha tardado año y medio en desarrollar e investigar el nuevo buscador
Y uno de ellos será Terra. La firma de internet está vinculada ahora a Google, pero 'pertenece al grupo Telefónica, igual que TPI', añaden estas fuentes, y será una de las claras candidatas a incluir Noxtrum en su oferta.
En cualquier caso, la editora de las Páginas Amarillas no plantea una competencia directa y exclusiva con Google o Yahoo. Ahora que el mercado está más maduro, TPI considera que puede triunfar donde otros fracasaron porque los usuarios de los países más desarrollados en sociedad de la información ya no se conforman con un solo buscador, sino que acuden a varios para contrastar y conseguir información más amplia y acertada.
Necesidades de los usuarios
En este campo es donde TPI quiere diferenciarse. En primer lugar, los servicios están enfocados al mercado español -luego lo estarán al latinoamericano-, así que una baza fundamental será el idioma español de los resultados. Unido a ello está el carácter local de Noxtrum, que es precisamente donde fallan los buscadores internacionales. Con las bases de datos de TPI -restaurantes, comercios, tiendas, profesionales, teléfonos...- y los desarrollos implantados, la intención es que los resultados de las búsquedas se acerquen más a las necesidades de los usuarios.
Otro aspecto en el que ha incidido Noxtrum es en la rapidez de las respuestas y el número más acotado de posibilidades. Con la máxima de que la alta cantidad de información que hay en internet abruma, los responsables de TPI aseguran que su buscador puede interpretar mejor que otros los deseos del usuario y reducir la oferta.
Una vez que se produzca el lanzamiento comercial, Noxtrum explotará las tres fuentes de ingresos que ha diseñado, además de la venta del producto a terceros. Serán los enlaces patrocinados, las posiciones laterales y el pago por inclusión de determinados textos en los resultados.
Multas a Telefónica y Cesky
Ayer no fue un buen día para Telefónica tanto en España como fuera de las fronteras nacionales. La Agencia de Protección de Datos, en el terreno local, y la Oficina de Protección de la Competencia Checa, en el internacional, consideraron multables determinados comportamientos de la operadora y anunciaron la correspondiente sanción.En el primer caso, la razón de la multa es el 'bombardeo' a un cliente con promociones en forma de mensajes multimedia sin relación con el servicio prestado. La Agencia de Protección de Datos ha estimado una sanción de 30.000 euros.El segundo caso afecta a la filial de la República Checa, Cesky Telecom. La Oficina para la Protección de la Competencia de este país ha sancionado a la operadora con 6,8 millones de euros por impedir la libre competencia. El inicio del conflicto se remonta a 2002 y la nueva dueña ya ha dicho que recurrirán la decisión.