Duro enfrentamiento entre el vicepresidente Solbes y Caruana
El vicepresidente económico, Pedro Solbes, cuestionó ayer duramente las críticas vertidas por el gobernador del Banco de España, Jaime Caruana, a la política económica del Ejecutivo. Solbes aseguró que hay 'margen suficiente' en los Presupuestos de 2006 para hacer frente al mayor gasto.
La tormenta política se inició a primera hora de la jornada cuando el gobernador compareció en el Senado. En su discurso tradicional sobre la marcha de la economía y en un tono más crítico de lo habitual, avisó al Gobierno de que los nuevos compromisos de gasto adquiridos pueden hacer saltar por los aires sus previsiones. Concretamente, Caruana se refirió al mayor gasto en pensiones a través de enmiendas a los Presupuestos del Estado para 2006, al acuerdo sobre financiación sanitaria que concede más fondos a las comunidades para salir del agujero financiero actual, y a los diferentes acuerdos alcanzados por el Gobierno con sectores muy afectados por el encarecimiento del petróleo (transportistas, pescadores y agricultores, entre estos últimos aún sin adoptar).
Caruana indicó que estos compromisos de gasto se han adoptado sin recortes compensatorios en otras partidas por lo que existe un 'riesgo de desbordamiento' de la ejecución presupuestaria para el año que viene.
Por tanto, sugirió un tono 'más restrictivo' en la política fiscal, con un control mayor del gasto y un aumento del superávit previsto para el conjunto de las administraciones públicas.
El gobernador del Banco de España dice que está 'recabando información' sobre el crédito de La Caixa al PSC
Además, el gobernador señaló que pueden ser 'contraproducentes' las compensaciones otorgadas a transportistas y pescadores porque, aunque a corto plazo ayudan a compensar las pérdidas en estos sectores, a largo plazo atrasan la implantación de procesos productivos más eficientes en energía.
En materia tributaria, aconsejó a Solbes que las reformas previstas en IRPF y el impuesto sociedades se midan bien para que no supongan un coste recaudatorio excesivo.
En clave más política, Caruana hizo comentarios al préstamo concedido por La Caixa al Partido Socialista de Cataluña (PSC) y a su posterior renegociación en 2004 (supuso la condonación de parte de la deuda), que ayer ratificó el consejo de administración de la propia entidad financiera. 'El Banco de España ha recibido alguna denuncia sobre este asunto y estamos actuando en consecuencia recabando información', aseguró. El gobernador añadió que la entidad respetará 'su marco de actuación, que es el de preservar la solvencia' porque 'hay otros componentes como la financiación de partidos políticos que corresponden al Tribunal de Cuentas'.
La reacción del vicepresidente no se hizo esperar. Tres horas después, aprovechando su presencia en el Pleno de las Cámaras de Comercio, Solbes rechazó una por una las críticas de Caruana. 'Discrepo en lo comentado por el gobernador en política económica', dijo insistiendo en que los Presupuestos para 2006 'tiene margen suficiente' para hacer frente a los mayores gastos que, además 'tienen caracter productivo' en su mayoría. Añadió que las ayudas del Gobierno por el alza del petróleo son transitorias, sin que afecten a los precios relativos a largo plazo.
Mucho más crítico fue Solbes respecto a las apreciaciones de Caruana sobre el crédito de La Caixa al PSC. El vicepresidente recalcó que el gobernador 'es independiente en materia de política económica' y puede hacer sugerencias en política fiscal pero que 'en lo relativo a la supervisión (bancaria), actúa por delegación y cuenta del Ministerio de Economía'. De hecho, Solbes, aconsejó a Caruana 'prudencia' a la hora de abordar estos asuntos. 'Me sorprende, en todo caso, que haya facilitado un dato -que el Banco de España está recabando información- y poco después diga que no tiene ninguna conclusión sobre el asunto', recalcó. El crédito de La Caixa al PSC centra ahora la ofensiva del PP contra el Gobierno.
El rifirrafe de ayer entre el Gobierno y Caruana tiene un precedente cercano en el discurso que pronunció en septiembre el gobernador en el Congreso sobre los Presupuestos. Sin embargo, en ese caso las críticas fueron menores y respondidas indirectamente por el ministro de Industria, José Montilla.