Lanxess traslada a España la I+D del color para algunos plásticos
Lanxess, grupo químico escindido de Bayer, ha decidido trasladar a España el laboratorio mundial de investigación y desarrollo (I+D) del área de colores para la producción de plásticos estirénicos. La compañía, que recibirá ayudas públicas de la Generalitat en concepto de innovación, decidió en septiembre pasado traspasar a la factoría de la petroquímica de Tarragona la sede europea de esta gama de productos, además de comprometer unas inversiones de 16 millones de euros.
La compañía ha aprobado ampliar la capacidad de la planta española de las 120.000 toneladas a las 170.000, después que la plantilla de 250 empleados aceptase reducir la parte variable del sueldo, renunciase a la revisión del IPC (con un máximo del 1,5% de diferencia) y a parte del tiempo de descanso, acordando trabajar 24 horas más al año. Estas medidas de flexibilidad, que estará en vigor hasta 2007, fueron básicas para que el grupo alemán se decantase por cerrar la factoría alemana de Dormagen, que supondrá la reducción de 300 empleos. La producción de la planta alemana es la que se trasladará a Tarragona.
La reordenación del grupo de química básica alemán no ha cesado desde su constitución en enero pasado. Las fuertes inversiones que había destinado Bayer en los últimos 10 años no fueron suficientes para rentabilizar la división de química básica. Tras la segregación, Lanxess ha realizado otra separación de negocio.
En este caso, ha independizado la división de química fina, que pasará a denominarse Saltigo. La nueva empresa iniciará su actividad dentro de un año y reducirá la plantilla en 500 personas en todo el grupo hasta 2007, aunque no especificó en qué centros. Saltigo no fabrica en la petroquímica de Tarragona.