_
_
_
_
EE UU

La Fed cumple el guión y sube los tipos al 4%

La Reserva Federal hizo ayer lo que ha hecho en sus últimas 11 reuniones y lo que todos esperaban: subir un cuarto de punto los tipos de interés, que quedan en el 4%, su mayor nivel en cuatro años y medio. En su comunicado, la autoridad monetaria sigue hablando de subidas graduales.

Los gobernadores de la Reserva Federal llevaban semanas anticipando en sus discursos esta subida e incluso uno de sus miembros, Janet Yellen, fue más allá al estimar que el tipo neutral (que ni estimula ni restringe el crecimiento) estaría en la horquilla del 3,5% y el 5,5% y 'actualmente estamos en la parte baja de la banda'.

Con todas estas pistas, los mercados centraron su interés en el comunicado que acompañó la decisión y en el que la Reserva repitió que actualmente la política monetaria sigue estimulando el crecimiento y que este estímulo se retirará de forma gradual. Esta vez, y a diferencia de la reunión precedente, Alan Greenspan ha contado con un voto unánime para subir el precio del dinero y, en sus consideraciones sobre la situación económica de EE UU, explica que aunque los elevados precios de la energía y los huracanes han puesto presión en la actividad económica y el mercado de trabajo, el crecimiento es robusto 'y probablemente se mejorará gracias a los planes de reconstrucción de las áreas afectadas por los huracanes'. Por lo que se refiere a la inflación, desde la Fed explican que el precio de la energía está poniendo presión aunque de momento ésta está siendo 'relativamente baja' en los meses recientes y a largo plazo 'la expectativa es que se mantenga contenida'. La interpretación de los analistas es que en la Fed temen que un desbocamiento repentino de los precios le llegue a la autoridad monetaria con la guardia baja.

Todo ello cimienta la creencia de que, mientras Greenspan presida la Reserva, seguirá habiendo subidas de un cuarto de punto. Esto supone medio punto más, ya que se espera que Ben Bernanke, candidato elegido por George Bush para sustituirle, sea confirmado en el cargo en las próxima s semanas por el Senado y tome posesión el 1 de febrero.

Respecto a la inflación, los últimos datos muestran cómo el índice subyacente de precios de los gastos de consumo personal (el que más de cerca vigila la Reserva) subía en septiembre un 0,2% tras el 0,1% de agosto. El índice interanual queda en el 2%. Este porcentaje está aún, y desde hace dos meses, en lo que desde la Reserva se tolera; no obstante, se espera que los elevados gastos en energía, que aún no se han trasladado a la inflación subyacente, se vayan filtrando poco a poco. La labor de vigilancia de los precios se produce mientras -como atestigua la Fed- la economía sigue creciendo, gracias sobre todo al consumo de los ciudadanos, el gran pilar del PIB estadounidense. Las primeras estimaciones oficiales hechas públicas la semana pasada indican que a pesar del difícil mes de septiembre, en el que se empieza a notar el efecto de los huracanes, en el tercer trimestre la economía creció a un ritmo del 3,8%.

La lectura es muy positiva porque los altos precios de la energía son un riesgo tanto para la inflación como para el crecimiento, y de momento ambas cuestiones, parecen estar bajo control. No obstante, hay un segundo interrogante sobre el crecimiento y es el efecto que la burbuja en buena parte de los mercados de la vivienda pueda jugar en el futuro.

Desde hace dos meses distintas variables que toman el pulso a este mercado muestran un cierto enfriamiento de los precios, algo que puede restringir la capacidad de gasto de los consumidores, que han utilizado los bajos tipos para refinanciar sus hipotecas o vender y contar así con ingresos adicionales.

Archivado En

_
_