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Previsiones

El Gobierno ultima un plan de invierno para garantizar el suministro de gas

El Ministerio de Industria está a punto de aprobar un plan invernal para garantizar el suministro del gas natural, que entra en vigor el lunes 1 de noviembre. Es la primera medida que se aplica al amparo de las nuevas normas técnicas del gas.

Las comercializadoras de gas natural deberán tener en sus plantas existencias equivalentes, al menos, a tres días de su consumo en firme. En el caso de las existencias en los tubos, la exigencia se limita, al menos, a un día. De lo contrario, estas empresas entrarán en desbalance y deberán someterse a lo establecido en las nuevas normas técnicas del sistema del gas (penalizaciones o compra de combustible al resto de comercializadoras mediante subastas) que aprobó hace un par de semanas Industria a través de una orden ministerial.

Las citadas exigencias forman parte de un plan invernal que está ultimando el ministerio y en cuya elaboración han participado las empresas integradas en la patronal Sedigas. En un encuentro con medios de comunicación, responsables de esta asociación aseguraron ayer que el plan entrará en vigor el próximo lunes, 1 de noviembre, y en él se incluyen exigencias específicas y 'endurecidas' que ya establecen las normas técnicas para el resto de los meses del año.

El presidente de Sedigas, Antonio Llardén, indicó que las empresas 'empezaron a preparar en mayo sus propuestas para este plan de invierno, con tiempo suficiente para que se pudiera aplicar ahora'. Y añadió que sólo falta que Industria lo apruebe a través de una resolución ministerial.

Los responsables de Sedigas dieron ayer cuenta de una normativa, cuya elaboración dio los primeros pasos en 2003 (de hecho, la propuesta aprobada es la vigésimocuarta) y con la que se pretende evitar problemas en el suministro como los registrados el invierno pasado.

Las normas técnicas establecen un sistema de penalizaciones para las comercializadoras de gas natural que utilizan las infraestructuras del transportista, Enagas, y entran en desbalance (situación que se produce cuando utilizan más combustible del que han metido en la red de gasoductos).

Esta medición es casi instantánea (dos días frente a los 45 días actuales) y permite conocer con rapidez quién produce los desfases. Para evitar las penalizaciones que impone la norma para estos desfases (el 150% de la cotización del gas en mercados prefijados por la norma) la comercializadora podrá acudir a comprar gas en las subastas que establecerá Enagás y que suponen el germen para la creación de un mercado secundario.

El regulado se mantiene

Respecto al mercado regulado, cuyo abastecimiento debe garantizar Enagás, ésta compañía prevé que pase de los 62.000 GWh actuales (de los cuales, 51.000 GWh corresonden a clientes convencionales y 11.500 a centrales eléctricas bicombustibles y algunas grandes industrias) a 68.000 GWh en 2006.

Enagás prevé incorporar 10.000 GWh procedentes de los clientes de menos de 100 MW que han solicitado el trasvase del mercado libre al mercado regulado a tarifa. Por el contrario, espera que salgan 7.000 GWh de las plantas bicombustibles que funcionan con fuel y gas, alternativamente, y cuyo desvío del regulado ha pedido el operador del sistema.

No obstante, pese al aumento en valores absolutos, la cuota del mercado regulado se mantendrá en 2006 el actual 16% o ligeramente por debajo.

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