Telefónica de España cambia su estructura para cumplir metas
Adaptarse a las necesidades de los clientes y llevarles los mejores productos a través de la tecnología más avanzada. æpermil;ste es el objetivo de Telefónica de España y para ello ha acometido una reestructuración en tres de sus principales direcciones generales.
El objetivo es llevar la banda ancha al 60% de los hogares en 2010 y con velocidades máximas de 50 megas. No le corresponde a Telefónica en solitario la tarea, pero sí será la principal contribuidora al éxito o el fracaso de esta meta que se ha impuesto el presidente de su filial de telefonía fija española, Julio Linares.
Uno de los primeros pasos para lograr estos objetivos pasa por modificar la estructura empresarial de la compañía. Así lo ha aprobado el comité de dirección de Telefónica de España, en un movimiento que afectará a tres direcciones generales.
La dirección general de Operaciones es una de las afectadas. Mantiene su nombre, pero asume competencias que hasta ahora estaban en otras áreas. De ella dependerá toda la parte técnica de la operativa de Telefónica de España, desde las instalaciones, centrales o centros operativos, hasta el mantenimiento de cualquier dispositivo en el domicilio o sede del cliente.
Por primera vez, esta dirección general asume las riendas del Centro Nacional de Supervisión de Operaciones, el gran hermano de la red, capaz de controlar y detectar problemas en cualquier punto de la infraestructura.
La segunda área renovada es la dirección general de Infraestructura, que cambia de nombre y pasa a apellidarse de Red. Y es que su cometido es innovar y adoptar la mejor tecnología para transformarse hacia un modelo de red IP basada en la fibra óptica.
Y para llegar a los clientes en todas sus necesidades y con los productos más nuevos y acertados, se potencia la dirección general de Productos y Servicios, que pierde la denominación de Marketing.