Un empresario, multado con 210 euros por lesionar a un inspector de Trabajo
Un empresario de la localidad valenciana de Cullera ha sido multado con 210 euros por lesionar a un inspector de Trabajo que quería revisar su empresa, según consta en la sentencia de la sección cuarta de la Audiencia de Valencia que ha confirmado la decisión del juzgado de instrucción número 4 de Sueca (Valencia) que fue el que impuso la sanción.
La sentencia recurrida declaró probado que el 13 de agosto de 2004 el denunciante, durante el ejercicio de sus funciones de inspector de Trabajo, se dirigió a esta empresa de Cullera donde se identificó y dijo que iba a realizar una inspección. Sin embargo, el dueño le contestó que no le iba a mostrar nada y que se fuera a otras compañías 'donde hacían falta las inspecciones'.
Como consecuencia de esta actitud, el denunciante salió del local y le advirtió de que los hechos podían ser constitutivos de una infracción grave por lo que el dueño de la empresa le contestó con insultos, le arrinconó contra una pared y contra un coche, acciones que le provocaron una contusión en la boca.
El juzgado condenó al dueño de la empresa a pagar 180 euros por una falta de lesiones y a otros 30 por injurias, además de pagar al inspector de Trabajo 76 euros por los daños personales sufridos.