Vegara opina que hay que delimitar mejor la definición de consejero independiente
El secretario de Estado de Economía aseguró ayer que el buen gobierno aún tiene carencias en comparación con otros campos de la gestión empresarial y que es necesario abordar un debate sobre el grado de independencia de los consejeros denominados como tales.
Los consejeros independientes son clave en los mecanismos de buen gobierno y deben ser la voz de los minoritarios y constituirse en contrapeso al presidente y los consejeros dominicales dentro del consejo de administración', afirmó ayer el secretario de Estado de Economía, David Vegara, durante su intervención en unas jornadas sobre buen gobierno organizadas por Recoletos.
Sin embargo, la consideración de independencia de estos administradores se ha visto puesta en entredicho en muchas ocasiones. Tanto, que la definición de consejero independiente, su elección y su eventual cese, o su retribución se han convertido en asuntos principales en la agenda de la comisión Conthe, a cuyos expertos ha encomendado el Gobierno la elaboración de un nuevo cuerpo de recomendaciones de buen gobierno que refunda en lo posible los informes Olivencia y Aldama e integre las recomendaciones de la CE y la OCDE en estos aspectos.
Según el secretario de Estado de Economía, es necesario abordar la figura del consejero independiente, 'desde el momento en que muchos de ellos son nombrados por el presidente y por los consejeros dominicales, por lo que su autonomía podría quedar en entredicho desde el inicio de su andadura'. Vegara recordó no obstante, que la cualidad de independencia de estos consejeros puede quedar también comprometida después de su nombramiento. 'No basta con que los consejeros independientes cumplan ciertas condiciones personales', como no tener vínculos con la empresa, los accionistas significativos, el presidente y consejeros dominicales, ni familiares ni comerciales que puedan crear conflictos de intereses que pongan en entredicho su capacidad de juicio. En opinión de Vegara, se requiere además un análisis de otros aspectos, como la necesidad de que se establezcan plazos de mandato o de que se restrinjan las retribuciones adicionales a las obtenidas por su actividad.
El secretario de Estado de Economía, que aseguró que el nuevo código de buen gobierno podría estar listo hacia el próximo mes de marzo, también explicó que otro de los asuntos que deben someterse a análisis del grupo de expertos de buen gobierno es el funcionamiento de las juntas generales de accionistas.
En opinión de Vegara, se debe evitar que las juntas de accionistas se conviertan en un mero acto de rendición de cuentas o explicación de datos económicos. 'Los accionistas deben tener conocimiento de cómo se gestiona su empresa. Por ejemplo, deben tener conocimiento de determinadas sanciones muy graves que se impongan a la empresa, como en asuntos de blanqueo de capitales'. Otro de los aspectos sobre los que los administradores deberían informar en las juntas generales de accionistas es, en opinión del secretario de Estado de Economía, la presencia de la mujer en la dirección y órganos de administración de la empresa.