La feria del calzado amplía la presencia internacional

Sipiel acoge a 824 firmas de zapatos y marroquinería de 17 países

Los profesionales del mundo del calzado que, desde hoy y hasta el próximo sábado, traspasen las puertas de Ifema harán bien en dejarse el reloj en casa. Recorrer los pasillos y los expositores de la decimoquinta edición de la Semana Internacional de la Piel (Sipiel), un evento organizado por Ifema y que incluye las ferias de Modacalzado (Salón Internacional del Calzado) e Iberpiel Marroquinería (Salón Internacional de Marroquinería y Artículos de Piel), supondrá tener la oportunidad de examinar las propuestas de 824 empresas, visitar cinco pabellones y caminar sobre una extensión de 37.531 metros cuadrados.

Siete años después de su creación, Sipiel ha crecido un 67% en expositores internacionales y cerca de un 45% en superficie de exposición de firmas extranjeras. En relación a la última edición del evento, el saldo también ha sido positivo. Las firmas participantes han crecido un 9,7% mientras la superficie contratada lo ha hecho un 8,65%. Un total de 17 países participan en la edición de este año, que incluye la presencia de firmas de todo el mundo, desde estados europeos como Alemania, Italia o Francia hasta naciones asiáticas como India o Pakistán y países americanos como Colombia, México y Estados Unidos.

La progresión ascendente de Sipiel ha obligado a redistribuir los pabellones que albergarán ambas ferias y que mostrarán las tendencias que inundarán las tiendas españolas la próxima temporada primavera-verano. Modacalzado, que incluye 695 expositores, ocupará 31.817 metros cuadrados distribuidos entre los pabellones 6, 8, 9 y 10. Entre las nuevas incorporaciones de firmas que se estrenan en la feria este año destacan Fornarina, Paco Milán, New Balance, Gant, Barbour, Florsheim o Sabelt.

Por su parte, Iberpiel Marroquinería ocupará una superficie de 5.713 metros cuadrados en un único pabellón, el número 4. Un total de 129 firmas presentarán sus colecciones allí, entre las que destacan algunas que lo hacen por primera vez. Es el caso de Benetton, Superga, Sisley y Cromia.

El optimismo de las organizadores y las buenas perspectivas de la feria son especialmente importantes para el sector del calzado, inmerso en el duro reto de superar la crisis por la creciente competencia de los países asiáticos, cuya mano de obra a bajo precio abarata el precio de sus productos y los hace más competitivos.

Los último datos de la Federación de Industrias del Calzado Español (FICE), que recogen la situación de enero a mayo de este año, ponen de relieve un descenso del 14% en el número de pares exportados, aunque al mismo tiempo revelan un aumento del precio medio de exportación del 6%. 'Valoramos positivamente el aumento del precio medio de exportación, porque indica que exportamos el tipo de producto correcto para nuestro país, incrementándose la venta hacia productos de más calidad', señalan fuentes de FICE.

Durante el primer semestre del año, el sector ha exportado 45,6 millones de pares por valor de 735,19 millones de euros. A su vez las importaciones han alcanzado los 121,2 millones de pares, un 30% que el año anterior, por un valor de 571,33 millones de euros, lo que supone un 18% más.

Siete de cada diez pares de zapatos fabricados en el sector tienen como destino la exportación. Los datos de 2003 reflejan un valor de exportación de 1.920 millones de euros y un saldo exterior con un superávit de 911 millones de euros.

Cuatro tendencias para la primavera

 

'Aire robado', elegancia en colores pastel

De las cuatro tendencias que presenta para esta primavera y verano el Foro Español de la Moda del Calzado -una iniciativa de FICE- destaca la elegancia y el misterio de Aire robado, una corriente que se inspira en la influencia de los fenómenos meteorológicos sobre las formas y el color. En los diseños predominan los colores pasteles combinados con azules, grises, caquis y morados. Los colores metálicos, en concreto el plata mate, tienen también un hueco en las colecciones. Las pieles, pequeñas y suaves, se combinan con lentejuelas y perlas.

'Agua prohibida', tonos frescos y marítimos

Frescura, libertad, alegría y calma, aunque siempre con un tono peligroso. Los diseños englobados bajo el epígrafe de Agua prohibida representan una tendencia dulce, pero ácida. Se extreman los colores, los detalles y las formas; se utilizan brillos, peceras de colores, fondos marinos y transparencias. Los materiales incluyen charoles y otras pieles brillantes y vinilos. Se abren paso los estampados, con flores de agua, animales de fondos marinos, rayas y dibujos abstractos. Entre los adornos, cuentas, peces y corales.

'Tierra perdida', fuerza y naturaleza en el material

Es la tendencia más natural de las cuatro. Abundan en los diseños los colores calientes y densos de las arcillas. Colores que reflejan los troncos, con tonalidades ocres, marrones, sienas y rojizos, unidos al gris oscuro, que representa las rocas y el granito. En el capítulo de los metalizados, se imponen los cobres, bronces, oro y plata viejos. Los materiales son naturales y fuertes. Pieles grandes, lisas o con grano, linos bastos y sedas salvajes. Los motivos tribales y los cocodrilos y otros animales inspiran los estampados.

'Fuego loco', el brillo y la provocación

Una línea provocativa y sensual que representa una tendencia agresiva y, al mismo tiempo, picante. El color que domina los diseños es el rojo pasión o rojo Chanel. También el negro, los azules oscuros y los verdes y oros vestirán los pies con todas sus variantes de tono y matiz. Se emplean materiales naturales, pero muy tratados. En algunas ocasiones con aspecto brillante y acristalado; en otras quemados. Los adornos son sobrios o muy extremos, con piedras, carbón puro y diamantes. Se apuesta por el charol y el cuero labrado.