Problemas para vender
Las cifras españolas de comercio exterior siguen presentando nubarrones. La balanza por cuenta corriente, es decir, la diferencia entre lo que ingresa y lo que paga España por el intercambio de mercancías, servicios, rentas y transferencias, ha alcanzado entre enero y mayo un déficit de 26.040 millones de euros, casi el doble que en igual periodo del año pasado. Se reafirma así de nuevo la limitada capacidad para vender de la economía española, frente a su alta facultad para comprar. Algunos analistas ven ya este desequilibrio, íntimamente ligado a la falta de competitividad, como el más importante de la economía española. Puede que no vayan demasiado descaminados. Sobre todo si se tiene en cuenta que el superávit del sector turístico, la primera industria española, no sólo se ha reducido, sino que su balanza particular también pierde fuelle.