Irán retomará hoy su plena actividad nuclear en medio de negociaciones internacionales
En plena reunión de urgencia del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) en Viena para intentar poner solución al contencioso nuclear, Irán ha anunciado que hoy levantará los precintos que la ONU colocó sobre la controvertida planta de Isfahán de enriquecimiento de uranio y cuya reactivación amenaza con provocar una crisis internacional.
Así lo ha afirmado el jefe de la organización iraní de la energía atómica citado por la televisión estatal. El proceso de reactivación de la planta de Isfahán comenzó el pasado lunes, lo que avivó las tensiones que el país mantiene desde hace unos años con varios países europeos. El levantamiento total de los precintos supone la reactivación completa de la conversión de uranio, el paso previo para el polémico enriquecimiento de uranio cuyos posibles usos militares teme la comunidad internacional.
El OIEA está reunido desde ayer en Viena para que la llamada troika europea, compuesta por Francia, Alemania y Reino Unido, negocie con Irán un final a su programa nuclear. El viernes, estos tres países de la Unión Europea propusieron al régimen de los ayatolás cooperación a cambio del cierre de sus plantas nucleares. Sin embargo, Irán consideró la propuesta como ¢un insulto¢.
No obstante, Irán ha insistido en que la reactivación de la planta de Isfahán se haga bajo la vigilancia del OIEA, que mantiene controlada la suspensión de la actividad nuclear iraní desde febrero de 2003. Irán está esperando a que la instalación concluya para reactivar completamente la planta nuclear.
Continúan las negociaciones
El OIEA colocó los primeros precintos el pasado mes de noviembre, cuando Irán temió que la comunidad internacional elevara el conflicto al Consejo de Seguridad de la ONU como paso previo a un proceso sancionador. Irán anunció entonces que la suspensión sería temporal. Desde entonces, Irán ha considerado que las sucesivas negociaciones con la Unión Europea sólo sirven para negar al país su derecho ¢inalienable¢ a fabricar combustible. Aunque Occidente teme que el enriquecimiento de uranio pueda ser utilizado por el régimen iraní para fabricar armas atómicas, Irán insiste en que sólo quiere generar energía con fines pacíficos.
A falta de consenso durante la primera jornada entre sus 35 miembros, la Junta de Gobernadores del OIEA continúa hoy su reunión con expectación después de que el presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, haya comunicado al director general de la ONU, Kofi Annan, que tiene una ¢nueva propuesta¢ para solucionar la crisis.
El objetivo de los europeos es hacer un llamamiento a Irán a seguir negociando y a no proseguir por ahora con sus actividades nucleares de forma unilateral. El martes, Sirus Nasseri, el líder de la delegación iraní en la reunión de Viena, aseguró que su país quiere seguir negociando con los europeos, aunque sólo si éstos reconocen el derecho de Irán a acceder a esa tecnología. Mientras, los países en desarrollo en la Junta aseguran que no están dispuestos a aceptar una resolución que se pueda entender como un llamamiento vinculante a Irán a suspender actividades nucleares consideradas legales bajo el Tratado de No Proliferación de armas nucleares (TNP), firmado también por Teherán.
Se descarta por el momento que la Junta denuncie a Irán ante el Consejo de Seguridad de la ONU, que tiene los poderes de aplicar sanciones. No obstante, en círculos diplomáticos se habla de la posibilidad de una nueva reunión urgente de la Junta de Gobernadores del OIEA para las próximas semanas, dependiendo de cómo reaccione Teherán a la resolución que se apruebe.
La Administración de George W. Bush, que incluyó a Irán en su ¢Eje del Mal¢, acusa al régimen de los ayatolás de querer hacerse con armas nucleares. Teherán alega que su programa sólo tiene fines pacíficos como la generación de energía eléctrica.