Ono pide 3.300 millones para pagar Auna y refinanciar su deuda
Ono ha logrado un nuevo préstamo de 3.300 millones con el que conseguirá cerrar la compra de Auna TLC y al mismo tiempo refinanciará la deuda de la compañía. SCH, ABN Amro y Calyon le han concedido un crédito calificado de alto riesgo, que Ono va a combinar con la emisión de bonos basura.
Ono está reestructurando toda su base financiera con el fin de obtener los fondos que comprometió para comprar la división del cable de Auna, pactada la semana pasada por un precio de 2.251 millones. Después de lograr el apoyo de cuatro firmas de capital riesgo -Providence, Thomas H. Lee, Quadrangle Group y JPMorgan-, que van a aportar 1.000 millones a través de una ampliación de capital, la compañía de Eugenio Galdón ha acudido a la financiación sindicada para lograr el dinero restante.
Ono recibirá en total 3.300 millones, que según la agencia Bloomberg los aportarán las entidades financieras ABN Amro, Calyon y el SCH. En paralelo emitirá 200 millones de euros más en bonos basura que estarán asegurados por diferentes bancos.
La inyección económica que recibe cubre de lejos el capital que necesita para completar la fusión con Auna TLC por lo que, según fuentes cercanas a la operación, el grueso de los fondos que se ha obtenido se destinarán a refinanciar la deuda actual del grupo de telecomunicaciones. En febrero de este año, Cableuropa, sociedad propietaria de Ono, y Retecal, operadora que fue absorbida por Ono, obtuvieron un crédito de 1.250 millones de euros. Pero la compra de Auna TLC, que supone asumir una deuda extra de 237 millones más los 1.013 millones no cubiertos por el capital riesgo, ha hecho que las garantías del antiguo crédito no tengan ninguna validez. Ono ha tenido que acudir a sus acreedores para que acepten modificar las condiciones de este crédito.
En febrero de este año, Cableuropa y Retecal obtuvieron un crédito de 1.250 millones de euros
Con el nuevo préstamo de 3.300 millones, fuentes cercanas a Ono aseguran que se van a cubrir todas las necesidades de la compañía resultante de la fusión con Auna TLC.
Pero también es verdad que Ono se encuentra se encuentra en una posición muy diferente a la de hace unos meses. Se convertirá en el operador de cable dominante, con 1,6 millones de clientes, cuyo único competidor es el ADSL. Fuentes de Ono mantienen que estas nuevas circunstancias le otorgan una posición mucho más cómoda para lograr unas mejores condiciones de financiación.
Sin embargo, la agencia de calificación Standard and Poor's no ha variado por el momento su ratio de riesgo, que está entre los más altos. Cableuropa tiene una calificación de B-, aunque apunta un tendencia a que mejore en el futuro. Su brazo inversor, Ono Finance, tiene incluso una peor calificación, CCC, pero también señalan una perspectiva positiva.
Las nuevas condiciones de la financiación que ha obtenido Ono no se han desvelado, pero el grupo de telecomunicaciones prevé detallar en los próximos días.
Bazas a favor
Una de las grandes bazas a favor con las que cuenta Ono a la hora de obtener financiación es la participación que el SCH tiene en la compañía, que asciende al 17,03%. El banco participa en el grupo Auna donde tiene un 27,34% del capital, y ha sido uno de los principales impulsores de la fusión de sus dos negocios de cable.
Aún no está claro cómo quedará la nueva estructura accionarial de Ono una vez se fusione con Auna TLC. Los detalles no se harán públicos hasta la operación quede definitivamente cerrada previsiblemente a finales del próximo mes de septiembre.
Un reto para el capital riesgo
La operación de Auna ha supuesto un desgaste importante para las grandes firmas de capital riesgo que han tratado de hacerse con la compañía como las estadounidenses Carlyle y KKR. Pero ésta puede considerarse como una de las transacciones más importantes que ha vivido el sector en España.La participación de JPMorgan, Providence, Thomas H. Lee y Quadrangle Group que han entrado en Ono con 1.000 millones de euros les hace uno de los principales accionistas de la nueva sociedad resultante.A ojos de la revista especializada Corporate Market, ésta puede tener aún más importancia que la de Amadeus por las sociedades BC Partners y Cinven, valorada en más de 4.000 millones de euros, y que aún está por concluir.La de Ono se suma a otra serie de operaciones de este año impensables hace apenas un lustro como la adquisición de Panrico por Apax (por cerca de 900 millones) o la compra del grupo Recoletos.
Una red de 35.000 kilómetros
La suma de Auna TLC y Ono da como resultado un serio competidor para los tradicionales operadores de telefonía fija y también para la televisión por satélite.La nueva compañía va a contar con unas infraestructuras de unos 35.000 kilómetros a través de las que puede ofrecer servicios de telefonía fija, televisión e internet en la mayor parte del territorio español. Ono cuenta con más de 9.100 kilómetros de red troncal de fibra óptica y casi 10.000 de red local de acceso, mientras que Auna TLC dispone de más de 9.500 kilómetros de red troncal y otros 6.200 kilómetros de red regional y metropolitana.Pero Ono se va a encontrar de bruces con una competencia que empieza a consolidarse como es la televisión a través del ADSL. Hasta ahora esta tecnología sólo ofrecía acceso a internet, pero con el lanzamiento de Imagenio por parte de Telefónica todos los operadores han acelerado sus planes en este área.