Las tiendas de Mango y Zara se suman al cierre anticipado del comercio

Las tres tiendas que la cadena catalana Mango posee en el centro de Londres echaron el cierre después del atentado, haciéndose así eco de las indicaciones que realizaron las autoridades británicas. El comercio siguió las recomendaciones iniciales dadas por la policía de mantener dentro de las tiendas a sus empleados. Luego, se pidió que salieran de los establecimientos y abandonaran el centro de la ciudad.

Pero la gran preocupación ayer de las cadenas de moda españolas con presencia en Londres era comprobar, en medio de toda la confusión y dificultad de comunicaciones, que ninguno de sus empleados se había visto afectado por el ataque terrorista.

Así lo pudieron constatar los dos líderes españoles, Mango e Inditex. 'Ninguno de los más de 250 empleados que la compañía tiene en Londres ha sufrido daño alguno. Ha costado mucho localizar a todos y hasta primera hora de la tarde no se ha podido comprobar que todos estaban bien. Ese ha sido el principal objetivo del día para la empresa', comentaba un portavoz de Inditex.

El grupo gallego tiene un total de 15 tiendas en la capital británica. Nueve son de la marca Zara (seis de ellas en el centro), cuatro de Massimo Dutti (tres en calles principales y una en un centro comercial), una de Bershka y otra de Zara Home. Además, su oficina de Gran Bretaña está en pleno corazón londinense.

Tampoco las dos tiendas que Adolfo Domínguez posee en Londres se vieron afectadas por los atentados, aunque fuentes de la empresa no pudieron precisar sobre su personal. 'Nos sentimos consternados por lo sucedido', añadieron.