Los líderes mundiales se unen contra la amenaza
Todos los países miembros del G-8 tenemos experiencia en terrorismo y estamos decididos en unir nuestras fuerzas para derrotar al horror'. Con estas palabras, el primer ministro Tony Blair, anticipó, nada más conocer los atentados, una unión de los líderes mundiales en contra del terrorismo, que se pondría de manifiesto a lo largo de todo el día con las declaraciones de los máximos responsables gubernamentales de todo el planeta.
Muchas miradas se dirigían ayer hacia el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, que se encontraba junto a Tony Blair, en la cumbre del G-8 en Gleneagles (Escocia), ya que su país fue el primero de occidente en sufrir un atentado islamista de magnitud desconocida hasta entonces. Su primera reacción fue ratificar que 'la guerra contra el terrorismo continúa'.
Se mostró también 'impresionado profundamente' ante la determinación en contra de los atentados de todos los líderes mundiales reunidos en la sala de la cumbre del G-8. 'Su determinación es tan grande como la mía', añadió.
Además de Bush y Blair, en la sala citada por el presidente estadounidense, se encontraban los máximos responsables gubernamentales de los seis países restantes que forman el G-8 (Francia, Italia, Alemania, Japón, Canadá y Rusia)
El presidente francés, Jacques Chirac, cuya falta de sintonía con el primer ministro británico es conocida, dejó a un lado cualquier animadversión para expresarle la total 'solidaridad, compasión y amistad'. También hizo un llamamiento a que las grandes naciones del mundo continúen su combate contra el terrorismo 'con una firmeza cada vez mayor'.
Precisamente, el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, anunció que los líderes del G-8 tienen la intención de aprobar 'medidas concretas e inmediatas' contra el terrorismo en la cumbre que termina hoy.
El canciller alemán, Gerhard Schöder, corroboró la tesis de Tony Blair, que apunta a que la serie de atentados coordinados tenía como meta la cumbre económica mundial del G-8. Además aseguró que la comunidad internacional 'debe hacer ahora todo por luchar conjuntamente con todos los medios contra el terrorismo'.
Las instituciones europeas se mostraron igualmente consternadas por la masacre en Londres. El refuerzo de la coordinación entre policías de los Estados miembros y las decenas de medidas de prevención emprendidas desde hace años no han servicio para evitar un nuevo ataque contra el corazón de Europa.
Se confirmaron, además, las advertencias del alto representante para la lucha contra el terrorismo en la Unión Europea, Gijs de Vries, que apuntaban que nuevos atentados podían sucederse en cualquier punto de Europa.
La UE no refugiará a terroristas
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso, se refirió a lo que habrá que hacer a partir de mañana y ofreció al Reino Unido la ayuda europea y prometió que 'no habrá refugio para los terroristas y el terrorismo en la Unión Europea'.
Muchos otros líderes mundiales e instituciones internacionales como la ONU hicieron públicos mensajes de solidaridad y apoyo. Entre ellos figuró el ex presidente del Gobierno español, José María Aznar, quien envió un mensaje al primer ministro Tony Blair en el que señalaba que la mejor manera de luchar contra el terrorismo es 'la determinación de toda la nación'.