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Vicente Moreno

'Me dicen que tengo que escuchar más'

Hace apenas tres meses que tomó las riendas de la consultora Accenture en España. El relevo en la dirección de Carlos Vidal, que ahora ocupa el cargo de presidente, no ha supuesto ningún cambio dramático dentro de la compañía, ya que su sucesor, Vicente Moreno, un ingeniero naval madrileño de 45 años, se ha formado al calor de la multinacional estadounidense. Ingresó en Accenture en 1985 y hace una década entró a formar parte como socio.

Pregunta ¿Qué hace un ingeniero naval dedicado al sector de la consultoría?

Respuesta Me lo preguntan muchas veces, pero son cosas que ocurren. Hace pocos días me preguntó un chico, ingeniero naval, que trabaja en Accenture, si este era un buen sitio. Yo creo que si, porque durante la carrera hacemos muchos trabajos prácticos y nos enfrentamos a situaciones diferentes, nos planteamos qué se puede hacer para encontrar la mejor solución. Mi formación me ha servido para afrontar situaciones distintas en consultoría.

'Un buen ejecutivo es aquel que consigue que estén de acuerdo los de arriba y los de abajo'

P ¿Pero durante la carrera no les forman en temas sobre gestión de empresas?

R La ingeniería tiene un componente técnico, pero también nos forman en estos temas, cada vez más. Creo que en temas de gestión se nace, aunque también te haces. Mi padre era ingeniero naval y tengo un hermano gemelo, que siempre hemos hecho lo mismo, pero a la hora de elegir carrera él decidió estudiar Arquitectura y yo Naval. A mí me gustaba la tecnología e innovar.

P ¿En las consultoras se innova?

R Es fundamental para cualquier negocio, pero sobre todo para la consultoría. En nuestro sector, tenemos dos vías. Desarrollar nuevos productos y servicios, y a la vez hacerlo de una manera eficiente y competitiva. Combinar lo nuevo y lo antiguo de manera eficiente.

P Usted ha desarrollado prácticamente toda su carrera profesional dentro de la misma compañía, ¿eso cómo se consigue?

R Entré a trabajar hace 20 años , después de una experiencia inicial en la Marina como ingeniero naval. El secreto está en que me han dado todas las posibilidades para trabajar en diferentes países, con distintas personas, para asumir responsabilidades. Esa es la riqueza del bagaje. La satisfacción está en los logros. En Accenture hemos contribuido al progreso y la modernización del país a través de nuestros clientes. Es un trabajo en el que estas continuamente cambiando. Fui a Polonia a abrir oficinas y para mí fue un cambio importante y decisivo en mi vida profesional. Han pasado, desde entonces, diez años y cuando veo la semilla plantada, me siento orgulloso.

P Hoy día es difícil, para cualquier empresa, retener durante dos décadas a un profesional.

R Además de la diversidad y de los desafíos nuevos, Accenture es una firma de oportunidades para el desarrollo profesional, muchas veces empujados a coger esos desafíos. La profesión de consultor es dura, tiene su propio código genético, has de tener amor por las cosas bien hechas, un compromiso con el cliente. Es un desafío y siempre hay que mejorar.

P Ahora que es consejero delegado, ¿cómo compagina su vida personal con el cargo?

R Trabajo las mismas horas, pero tengo claro que quiero compatibilizar ambas cosas. Por ejemplo, la época en la que hice más vida familiar fue cuando estuve en Polonia porque allí no tenía que viajar. Yo creo más en la calidad que en la cantidad de horas. Los españoles sabemos aprovechar el tiempo para disfrutar, pero yo estoy decidido a trabajar menos horas. Si queremos que sea así para todos, tenemos que dar ejemplo, tenemos que ser capaces de ser productivos en las mismas horas.

P ¿Cómo se da ejemplo dentro de una compañía?

R Las personas siempre miran hacia arriba cuando ven los valores de una empresa. Para un ejecutivo, es importante lo que hace, pero también cómo lo hace, cómo pide las cosas, cómo agradece el esfuerzo y el trabajo de los demás. Aquí las personas opinan sobre el liderazgo de sus supervisores. Un buen ejecutivo es aquel que consigue que estén de acuerdo los de arriba y los de abajo.

P ¿Qué destacan de usted?

R Dicen que soy un gestor de negocio, de ideas y de personas. Hay que tener esos tres atributos para poder progresar. Y yo me preocupo de que, en mi caso, avancen. Me ven bastante equilibrado, pero también me dicen que tengo que escuchar más, aunque yo considero que escucho mucho. Soy de esas personas que acepta muy bien las criticas. Creo que las ideas y los éxitos vienen de esa capacidad para saber escuchar. Me preocupa que las personas que trabajan aquí estén satisfechas, que puedan hacer compatible la vida personal con el trabajo.

'El éxito no es hereditario, hay que trabajarlo día a día'

Califica la sucesión del primer ejecutivo dentro de Accenture de 'suave'. Una vez asumido el cargo, Vicente Moreno asegura que cada día se pregunta qué puede ofrecer a la firma. Aunque las base de su aportación la tiene clara: 'Quiero traer ilusión e ideas para desarrollarnos como una empresa'. Señala que desde su posición se observa la compañía de otra manera. 'Ves lo que ocurre y lo que hacemos realmente. Además, me permite conocer y relacionarme con un equipo que ha sido protagonista de todos los logros'. Y si en algo insiste es en su 'vocación para aprender y escuchar'. Cuenta con el respaldo de los socios, y eso es algo que da tranquilidad. 'Creo que han valorado mi experiencia en ciertos temas porque he tenido la oportunidad de trabajar con clientes, también he sido el abogado o defensor de los empleados, tengo experiencia internacional en países como Polonia, Sudáfrica y México'.El nuevo reto lo ha tomado con ilusión y entre sus objetivos está su interés por 'aunar voluntades'.En su opinión, el liderazgo se basa en un estilo diferente de hacer las cosas, 'de valorar diferentes opiniones, comprender otras ideas, ya que un equipo es algo más que el liderazgo de una persona'.Es un defensor del código genético de Accenture, 'como empresa que hacemos compatible el negocio con el desarrollo de una carrera profesional, con eficiencia y pasión por hacer las cosas bien'.A lo largo de las dos décadas que lleva en Accenture, nunca ha pensado en cambiar de empresa. 'Si analizo las causas por las que estoy aquí veo que sobre todo ha sido por convencimiento de lo que hacia. Mi nombramiento me trajo un sentimiento de orgullo, por la elección y porque a lo largo de mi carrera ha habido personas que me han apoyado y me han traído hasta aquí', afirma Moreno, que considera que el 'éxito no es hereditario, sino que hay que trabajarlo día a día'.

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