La financiación autonómica se abordará al final de la legislatura
La propuesta de financiación presentada hace sólo unos días por la Generalitat catalana no ha modificado en lo sustancial el calendario político que José Luis Rodríguez Zapatero tenía pensado desde un principio para encarar de forma global este desafío con el conjunto de las comunidades autónomas.
La propuesta de financiación presentada hace sólo unos días por la Generalitat catalana no ha modificado en lo sustancial el calendario político que José Luis Rodríguez Zapatero tenía pensado desde un principio para encarar de forma global este desafío con el conjunto de las comunidades autónomas. El presidente anunció ayer en el debate del estado de la nación su propósito de incorporar a los Presupuestos del año que viene la revisión de la financiación sanitaria, sentida como una prioridad por buena parte de las comunidades, incluida Cataluña, y de dejar para más adelante, en la recta final de la legislatura, la negociación sobre la reforma del modelo global de financiación autonómica.
Según fuentes gubernamentales, el manejo de los tiempos que hace Zapatero implica apaciguar la urgencia de los territorios con mayor déficit sanitario y, al mismo tiempo, ganar margen de maniobra para encajar el nuevo Estatuto catalán, en el que el Ejecutivo tripartito desea incorporar un largo capítulo dedicado a la financiación, con la negociación en firme del nuevo modelo aplicable al conjunto de las comunidades autónomas.
Para que estas previsiones lleguen a buen puerto, la Conferencia de Presidentes autonómicos se retrasará, probablemente, al mes de julio y en ella se abordarán la mejora de la financiación sanitaria y las bases de la revisión del modelo general de financiación. El Gobierno lleva ya muy avanzados los estudios sobre el déficit sanitario, de forma que las comunidades más endeudadas podrán obtener un desahogo a partir de enero de 2006, cuando entren en vigor los nuevos Presupuestos del Estado.
Rajoy acusa a Zapatero de 'vivir de las rentas' y 'cruzarse de brazos' en política económica
Zapatero expuso ayer los principios generales que debe presidir la reforma del sistema general de financiación. El Gobierno pretende avanzar en la corresponsabilidad fiscal de las comunidades, mediante el aumento de la capacidad normativa que afecta a los diferentes impuestos. Será un acuerdo abierto a todas las fuerzas políticas que tendrá que pasar, inexorablemente, por el Consejo de Política Fiscal y Financiera, donde se sienta el conjunto de las comunidades autónomas.
El presidente del Gobierno ofreció ayer de forma reiterada al líder de la oposición, Mariano Rajoy, la creación de una mesa de diálogo para abordar el proceso de reformas estatutarias en curso. Las invitaciones fueron respondidas con el silencio. Antes de cursar este ofrecimiento, Zapatero escuchó de boca de Rajoy un diagnóstico apocalíptico sobre el futuro de España. 'Usted ha montado el mayor lío autonómico desde el inicio de la transición, ha puesto la nación en almoneda y se propone descoyuntar lo que haga falta con tal de que los nacionalistas le ayuden a conservar el poder. No le importa el precio. Está dispuesto a pagar lo que le pidan', sentenció el líder de la oposición.
En medios gubernamentales se espera que el tono del discurso pronunciado ayer por Rajoy se modere después de las elecciones gallegas (19 de junio) y entonces se inicie una etapa de acercamiento al Ejecutivo en todo lo que afecta a las reformas estatutarias, ya que el PP gobierna en estos momentos en nueve comunidades autónomas y en algunas de ellas ha propuesto tomar como referencia lo que en este terreno consiga Cataluña.
La tasa de paro bajará del 10%
La falta de entendimiento al respecto se tornó en un auténtico diálogo de sordos cuando ambos líderes políticos encararon el balance de la política económica en el último año. Zapatero señaló que con la puesta al día de la contabilidad nacional, España está creciendo por encima del 3%, mostró su compromiso con la estabilidad presupuestaria y su apuesta por las reformas estructurales que fomentarán 'un crecimiento más dinámico y equilibrado'.
En opinión del presidente, la economía española 'es hoy una de las más estables y confiables de Europa', como lo demuestran los criterios de las agencias de valoración crediticia más prestigiosas, que otorgan a España la mayor solvencia, en el nivel de Estados Unidos, Alemania o Francia.
En este contexto, Zapatero subrayó el buen comportamiento de la inversión empresarial en bienes de equipo, con crecimientos interanuales cercanos al 10% en la segunda mitad de 2004. Recordó también que la economía crea ahora empleo a un ritmo cercano al 4%, que equivaldría a casi 675.000 puestos de trabajo anuales. Supone cerca de la mitad del empleo generado en toda la Unión Europea. Todos los datos que maneja el Gobierno apuntan, según el presidente, a que el año que viene la tasa de paro bajará del 10% por primera vez desde 1979. Corroboraría este pronóstico la afiliación a la Seguridad Social, que aumentó a una tasa interanual del 3,5% en 2004, el mayor crecimiento desde el año 2000. Zapatero también recordó los datos del pasado mes de abril, en el que la afiliación sobrepasó los 17,5 millones de personas, 'el mejor dato de la historia'.
Rajoy reprochó a Zapatero 'vivir de las rentas' y 'cruzarse de brazos' en política económica, capítulo al que sólo aludió de pasada en su discurso.
En el horizonte de los dos próximos años, el presidente del Gobierno fijó como prioridades el desarrollo del plan de dinamización económica aprobado recientemente por el Consejo de Ministros, el plan de Fomento Empresarial, la reforma laboral y la reforma fiscal. También propuso sin éxito al líder de la oposición un pacto de Estado por la educación que aporte estabilidad al sistema. En el segundo año de legislatura, la acción del Ejecutivo se centrará en la implantación de la educación infantil, la extensión urgente de la red de banda ancha para llegar al final de la legislatura a todos los rincones de España, la aplicación del plan de ahorro y eficiencia energética y del plan de energías renovables que se aprobará antes del verano.
Asimismo, el Ejecutivo aprobará incentivos al empleo de la mujer y los jóvenes, sacará adelante el nuevo estatuto de los trabajadores autónomos y enviará al Congreso la nueva ley del Suelo. En sus planes entra también la remisión a Las Cortes de la nueva ley de Montes, que impedirá el cambio de uso del suelo en un plazo de 30 años cuando se produzcan incendios. También aprobará la ley de Dependencia como cuarto pilar del Estado del Bienestar.
El Gobierno prevé una mejora del empleo y que la tasa de paro descienda del 10% el año que viene
Primer examen. Zapatero se sometió ayer a su primer examen como presidente. Estuvo acompañado por sus vicepresidentes (abajo, derecha). Rajoy fue arropado de cerca por Ángel Acebes y Eduardo Zaplana (arriba, derecha). Por CiU intervino Durán i Lleida. Fotos: M. casamayón / P. monge
Rajoy descarta cualquier colaboración del PP en el proceso de paz que aspira a impulsar el Gobierno
El líder del PP, Mariano Rajoy, acusó ayer a Zapatero de 'traicionar a los muertos', 'saltarse la Constitución', 'fulminar la Ley de Partidos', 'deshacer el Pacto Antiterrorista', 'indultar a los asesinos', 'amordazar a las víctimas' y de promover un nuevo 'pacto de Lizarra'. De todas estas acusaciones, la que más dolió al presidente del Gobierno, por confesión propia, fue la primera. Lo que anticiparon todas ellas fue la nula disposición del Partido Popular a colaborar en un hipotético proceso de paz que suponga el fin de la violencia etarra.De nada sirvió que Zapatero le recordara en varias ocasiones a Rajoy la negociación que el ex presidente José María Aznar condujo con ETA en Suiza, a través de su amigo y colaborador Pedro Arriola, ni tampoco el recuerdo de los términos en los que en aquel entonces el propio Aznar se refirió a la organización terrorista, a la que llamó 'Movimiento Vasco de Liberación Nacional'. Rajoy concluyó ayer que Zapatero se ha prestado a 'enjuagues' con el lendakari en funciones, Juan José Ibarretxe, porque, de otro modo, dijo, 'ETA no se sentaría a hablar con usted'.El presidente del Gobierno expuso con firmeza los principios sobre los que el Gobierno afrontaría un proceso de paz y, además, se comprometió a comparecer en el Congreso en el momento en que se diera este escenario para explicar a todas las fuerzas políticas los pasos que en su caso protagonizaría el Ejecutivo para alcanzar el fin de ETA y también para solicitar su respaldo.El presidente advirtió de que 'nadie debe hacerse ilusiones', a la vista de la experiencia acumulada con la banda armada. En todo caso, agregó, 'mi obligación es trabajar por la esperanza'. 'El fin de la violencia no tiene precio político', aseguró, 'pero la política puede contribuir al fin de la violencia'. Por lograr este objetivo, trabajará 'sin descanso'.Actitudes diferentesEl presidente reprochó al líder del PP su falta de colaboración en la lucha antiterrorista. 'El Pacto obliga cuando se está en el Gobierno y también cuando se está en la oposición. Cuando se está en el Gobierno se agradece el apoyo, cuando se está en la oposición hay que dar el apoyo y es en esa situación cuando cumplir el Pacto tiene más mérito. Lo digo por experiencia', abundó.El presidente recordó también a Rajoy que cuando el anterior Gobierno del PP decidió ilegalizar Batasuna, él se enteró un minuto antes, a través de una llamada telefónica, y dio su apoyo al entonces presidente.
Otros compromisos contraídos por el Ejecutivo
1 El presidente del Gobierno anunció que el próximo verano se abordará la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial para redefinir la casación ante el Tribunal Supremo. Este mantendrá su supremacía en la unificación de doctrina, pero se reconocerá la condición de última instancia ordinaria a los tribunales superiores de Justicia de acuerdo al diseño autonómico del Estado. Con ello, Zapatero hizo un claro guiño a las aspiraciones del Gobierno tripartito de Cataluña, bien acogido por sus componentes.2 La mejora de la Justicia incluirá también la próxima entrada en funcionamiento de 250 nuevas unidades judiciales (juzgados y plazas de magistrado) en toda España. A lo largo de este año se dotará a la Administración de Justicia con 2.016 nuevas plazas, un 61% más que el año pasado. De ellas, 1.552 estarán adscritas a las comunidades autónomas. También se aumentarán en 135 las plazas de fiscales. La mayoría de estos compromisos se incluyen en el programa electoral del PSOE.3 El Gobierno reforzará este año la aplicación del programa AGUA, en el que se incorporan todas las actuaciones no derogadas en el Plan Hidrológico Nacional, para el que hay presupuestada una inversión de 2.767 millones de euros en toda España. De ellos, 577 corresponden a las cuencas mediterráneas. El líder del PP, Mariano Rajoy, acusó ayer a Zapatero de agravar el problema de la sequía con la paralización del trasvase del Ebro, extremo que fue negado por el presidente del Gobierno.4 Antes del verano, el Gobierno remitirá al Parlamento la ley que consagrará la definitiva independencia de los medios de comunicación públicos, a la vez que dispone los mecanismos para su sometimiento financiero y el cumplimiento de sus obligaciones de servicio público. Zapatero dio a entender que la asunción de la deuda de Radio Televisión Española se hará en un 'futuro inmediato', una vez que ya se ha solucionado el problema heredado de los gobiernos del PP en Renfe y en Izar.5 Los gastos en investigación y desarrollo para fomentar la productividad han crecido este año un 25% y en esa misma dimensión se mantendrán durante el resto de la legislatura, según anunció ayer Zapatero. El Gobierno se propone también mejorar los mecanismos de gestión y cooperación con las universidades, los organismos públicos de investigación y las empresas, dentro de la apuesta por la contratación estable de jóvenes investigadores de trayectoria reconocida.6 En infraestructuras del transporte, las inversiones ejecutadas en el primer año de legislatura alcanzaron, según Zapatero, los 9.738 millones de euros, superando en 1.855 millones la inversión media anual del periodo 2001-2003, lo que supone un crecimiento del 23,5%. El presidente del Gobierno señaló que para este año, el impulso a las infraestructuras y el transporte se refleja en la dotación presupuestaria de unos recursos totales que crecen un 35,8% respecto al año 2004.
ERC ofrece su apoyo, pero pide avances hacia el federalismo
El principal apoyo parlamentario del Gobierno, Esquerra Republicana de Catalunya, anunció ayer que seguirá siendo su aliado, informa Marcos Ezquerra. Eso sí, lo será 'sólo si no da ningún paso atrás' en justicia social, democracia y federalismo. æpermil;ste último fue el punto fuerte de la intervención del portavoz parlamentario de ERC, Joan Puigcercós, para quien ha llegado el momento del 'cambio de verdad' hacia un Estado federal 'que depende de la voluntad de las naciones que lo componen'. El portavoz republicano otorgó un 'aprobado justo' a los 25 años de funcionamiento del Estado de las Autonomías.Sobre el tema que, junto al terrorismo, centró la jornada de debate de ayer, la financiación autonómica, Puigcercós afirmó que el sistema actual perjudica las condiciones de vida de muchos ciudadanos catalanes, en una región que 'sufre un déficit fiscal de entre el 8% y el 11% de su PIB'. El portavoz exigió transparencia y pidió que 'no se venda la falsedad de que Cataluña es opulenta e insolidaria'. Y advirtió de que 'habrá nuevo Estatuto, con mayoría del 90% de los representantes del parlamento catalán, y ustedes deberán ratificarlo, porque contra una mayoría sólo caben argumentos de imposición'. Puigcercós vaticinó que 'no podrán utilizar la excusa con la que frenaron el Plan Ibarretxe, de no incluir a la mayoría de los vascos'.Otra reclamaciones nacionalistas pasa por el 'reconocimiento lingüístico' de las lenguas catalana, vasca y gallega en todo el Estado. Puigcercós quiso iniciar su discurso en catalán, pero el presidente del Congreso, Manuel Marín, lo evitó recordándole el reglamento de la Cámara. ERC exige también que la 'plurinacionalidad' se manifieste en todas las instituciones del Estado, incluyendo el Tribunal Constitucional, el Banco de España o el Consejo General del Poder Judicial.Puigcercós lamentó las 'reacciones furibundas que se producen cada vez que Cataluña pide a España que la escuche'. 'Pasó en 1993, con el PP; en 1996, con el PSOE, y ahora le vuelve tocar al que está en la oposición'. En este argumento abundó el portavoz de CiU, Josep Andoni Durán i Lleida, para quién 'con cada avance del modelo de financiación, se ha hablado de desvertebración de España'.