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Financiación

Andalucía, Valencia y Madrid urgen a Solbes a presentar su plan de financiación

Los responsables autonómicos no van a admitir privilegios en el nuevo modelo de financiación regional. Aun así, están dispuestos a debatir la propuesta catalana siempre que sea un diálogo multilateral. Andalucía, Valencia y Madrid piden al Gobierno central que presente su propio plan, anunciado para julio en la Conferencia de Presidentes.

Las comunidades autónomas desean que el vicepresidente económico, Pedro Solbes, plantee su propio modelo de financiación autonómica como punto de partida para iniciar el debate regional.

Algunas de ellas como Andalucía, Valencia y Madrid, de gran peso en el conjunto nacional, se atrevieron a pedírselo expresamente en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) reunido ayer, bajo la batuta de Solbes. El consejero andaluz, el socialista José Antonio Griñán, confía en que el Ejecutivo central 'se atreva' a presentar a las comunidades una propuesta que concilie los principios de autonomía financiera y corresponsabilidad fiscal.

Algunos consejeros de comunidades gobernadas por el PP, como el valenciano Gerardo Camps, o la madrileña, Engracia Hidalgo, echaron en falta también un paso adelante de Solbes. 'No fue capaz, ni siquiera de asegurarnos si en enero de 2006 tendremos un nuevo modelo de financiación o si entrará en vigor la reforma de la ley de estabilidad. Esto genera mucha incertidumbre porque las comunidades no sabemos si tendremos que gestionar en pocos meses según el actual modelo o atenernos a uno que aún desconocemos', dijo Camps. 'Creemos que el sistema actual es perfectamente válido, pero si se va a cambiar debemos saber cuanto antes cómo', aseveró Hidalgo, quien criticó que el asunto no se discutiera ayer en el Consejo, 'cuando es uno de los temas de actualidad'.

Los consejeros insisten en que el modelo no debe generar desigualdad

Solbes anuncia que el Gobierno presentará 'criterios útiles' de financiación en julio

El vicepresidente Solbes emplazó ayer a la próxima Conferencia de Presidentes (Zapatero más los 17 autonómicos) de julio para conocer 'algunos criterios útiles' de la propuesta de financiación del Gobierno, con independencia de los detalles que Zapatero haga públicos hoy en el debate sobre el Estado de la Nación.

La impresión que rezumaba ayer tras la reunión es que todo se puede conseguir con diálogo. Aunque en el orden del día de la reunión no figuraba expresamente el tema del modelo de financiación (sólo se había previsto aprobar el compromiso fiscal de las comunidades hasta 2008), en el ambiente estaba muy presente la reciente propuesta de financiación para Cataluña, realizada por el Ejecutivo catalán. La propuesta parte de la base de dejar recaudar a Cataluña todos los impuestos que se generen en su territorio, y que ésta ceda al Estado central como máximo el 50% de la recaudación, además de establecer límites a la solidaridad con otras comunidades. Este último punto es el que más rechazo suscita. Antes de la reunión, el presidente balear, Jaume Matas, avisó que desde esa comunidad no se entendería que la reforma de la financiación autónoma 'saliesen más diferencias de las que ya existen en la Constitución' entre unas autonomías y otras. En el vigente modelo de financiación regional se prevé un mecanismo de solidaridad a través del cual el Estado y las comunidades más ricas trasvasan recursos.

No obstante, Matas destacó la necesidad de 'respetar' cualquier propuesta que se haga desde un Ejecutivo regional , aunque recalcó que ésta 'no puede ser debatida sólo entre dos (Gobierno y Generaltitat), sino analizada desde una perspectiva multilateral'. A esta tesis se apuntan todos.

Desde Asturias, se apuesta por el diálogo sin olvidar la cohesión. 'Hablar con Cataluña nos valdrá para avanzar a todas', sostiene el presidente asturiano, Vicente Alvarez, para quien debe tenerse en cuenta, 'variables como el envejecimiento'.

Castells habla de 'punto de partida'

El consejero de Economía catalán, Antoni Castells, intentó ayer apaciguar los ánimos de los consejeros regionales más reacios a su propuesta, destacando las coincidencias con el Gobierno central y el resto de comunidades como la intención de aumentar la capacidad normativa de las regiones. Castells insistió en que la propuesta que ha puesto sobre la mesa la Generalitat catalana es 'sólo un punto de partida en el debate'.'No es un todo o nada, ya que está incluida en la reforma estatutaria, que debe aprobarse bajo un gran pacto', dijo. Además, precisó que 'también es modificable' la propuesta de porcentaje (50% como máximo) de recaudación que Cataluña daría al Estado sobre los ingresos obtenidos en la comunidad. En este sentido, indicó que 'aún quedan muchos aspectos por cuantificar'.Pese a lo monográfico de la reunión de ayer, el consejero catalán aprovechó la parte de ruegos y preguntas para informar al resto de consejeros de las líneas principales de la propuesta catalana, en lo que calificó como una 'obligación de cortesía' para con sus compañeros. Precisamente, Castells ya se encargó de enviar este documento a sus homólogos hace unos días. Sin embargo, el documento como tal no fue debatido en la reunión de ayer. El plan catalán cuenta con la sintonía de varias comunidades del PP en algunos aspectos. El presidente valenciano, Francisco Camps, calificó ayer de 'positiva' la petición catalana de mayor competencia normativa en los impuestos regionales.

El equilibrio fiscal de las autonomías se retrasa hasta el ejercicio 2008

El déficit cero de las comunidades autónomas se producirá en 2008, y no en 2007 como estaba inicialmente previsto. El único punto del orden del día de la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera de ayer era buscar un compromiso trienal sobre las cuentas conjuntas, y así se ha conseguido. Eso sí: el acuerdo modifica el Programa de Estabilidad, pues en 2007 las comunidades tendrán un déficit del 0,1% del PIB en lugar de equilibrio, lo que reduce una décima la previsión de superávit para el conjunto de las administraciones en ese año, que queda en 0,3%.El motivo de la modificación son los planes de saneamiento que afectan a cuatro Comunidades: Cataluña, Valencia, Galicia y Baleares, que seguirán en déficit hasta 2008. Las cuentas anteriores calculaban que esos déficit no superarían el 0,049% del PIB en 2007, lo que permitiría, con el redondeo al decimal más cercano, hablar de 'equilibrio'. Este hito queda ahora diferido hasta 2008. Aún así, Solbes destacó que, aunque en 2006 y 2007 el déficit autonómico redondeado sería del 0,1%, la evolución será positiva, pues en el primer año será del 0,14%, y en el segundo del 0,7%.Las cuentas de 2006 no cambian: el conjunto de las administraciones públicas tendrá un superávit del 0,2%, resultante de los déficit del 0,4% y 0,1% en Estado y las CC AA, el superávit del 0,7% en la Seguridad Social, y el equilibrio de las Corporaciones Locales.

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