Los accionistas fuerzan la dimisión de la cúpula de la Bolsa alemana
Rolf Breuer y Werner Seifert, presidente y consejero delegado de Deutsche Börse, la mayor Bolsa de Europa, anunciaron ayer su dimisión. Lo hicieron después de comprobar su falta de apoyos ante una junta el día 25 en la que un grupo de accionistas planeaba forzar su salida.
Los fondos opositores planeaban forzar la salida de la dirección en la junta del día 25
El capital en manos alemanas ha pasado del 35% al 7% desde el arranque de año
Los fondos anglosajones que copan la mayoría del capital del principal mercado financiero de Europa se cobraron ayer la cabeza del presidente de la Bolsa, Rolf Breuer, que dejará el cargo a fin de año, y el consejero delegado, Werner Seifert, que ya ha sido sustituido por el director financiero, Mathias Hlubek.
Los fondos opositores planeaban forzar la salida de la dirección en la junta del día 25
El capital en manos alemanas ha pasado del 35% al 7% desde el arranque de año
El consejo de la sociedad decidió ayer cambiar su composición 'para reflejar la nueva estructura accionarial de la compañía' y después de haber consultado con los accionistas. El día 25 hay una junta de accionistas en la que varios fondos planeaban forzar las dimisiones de Breuer y Seifert.
La oposición estaba liderada por la aseguradora italiana Generali y, sobre todo, los fondos de alto riesgo Atticus y TCI. El presidente de esta última sociedad, Christopher Horn, aseguraba días atrás que cuenta con el apoyo de más del 50% del accionariado para forzar la dimisión de Breuer de su cargo en la junta general. Después, dijo, iría a por Seifert. Ya no hace falta.
El tercer intento de Seifert de hacerse con la Bolsa d Londres, iniciado en noviembre, ha sido su tumba. Tras un tímido rechazo inicial por parte del mercado británico, que pedía más dinero, Seifert se encontró al enemigo en casa. Un buen número de accionistas consideraba excesivo el precio -1.950 millones de euros- que se pagaba por la London Stock Exchange, e hicieron fracasar a comienzos de marzo la opa. Los mismos fondos que pararon la operación han dirigido el acoso y derribo a Seifert, y han triunfado al sumar cada vez más capital a la oposición.
El accionariado de Deutsche Börse, mientras, ha experimentado una curiosa evolución. Desde finales de 2004, el porcentaje de accionistas alemanes se ha reducido del 35 al 7%. Mientras, los británicos han doblado su participación hasta el 48% y los estadounidenses la han elevado ligeramente del 26 al 29%, según los últimos datos disponibles. El regulador del mercado, de hecho, pidió hace semanas información a estos fondos para garantizar que su acoso al equipo directivo no respondía a una toma de control que obligase a opa.
En un último intento, Seifert quiso ganarse el favor del accionista elevando hasta 1.500 millones la retribución al accionista de aquí a 2007. vía dividendo y recompra de acciones. No fue suficiente. Las acciones de Deutsche Börse, que ganan el 40% en el año, subieron ayer un 2,6%, porque los analistas esperan que el vacío de poder eleve aún más el dividendo.
Una Bolsa cada vez menos alemana
Dada la nacionalidad de los accionistas, los expertos no descartan que el próximo presidente de Deutsche Börse sea anglosajón. Según el comunicado difundido ayer por la sociedad, es necesario que la presidencia y el consejo de vigilancia de Deutsche Börse se adapten 'a la nueva estructura del accionariado de la compañía'. Una estructura que ha variado en pocos meses para estar dominada de forma abrumadora por inversores estadounidenses y británicos. El nuevo consejero delegado no procederá de Deutsche Börse.El nombre que más suena como sucesor de Seifert es, sin embargo, un suizo. Según algunos analistas y medios de comunicación germanos, Reto Francioni, presidente del consejo de administración de la Bolsa suiza, podría convertirse en el nuevo presidente de la Börse. Un portavoz del parqué helvético dijo a Bloomberg que Francioni no tiene intención de moverse.La otra preocupación de los expertos es qué estrategia seguirá Deutsche Börse tras la remodelación de su cúpula. Se espera que los nuevos altos cargos sean más afines a los deseos de los accionistas y que aumenten, por ejemplo, el reparto de dividendo. Los analistas del banco BHF-Bank no descartan que la sociedad de liquidación y compensación Clearstream sea segregada vía OPV.Los accionistas no alemanes han sido críticos con el modelo de integración vertical de Deutsche Börse, en el que una sociedad agrupa desde la operativa de Bolsa a la compensación y liquidación de valores, pasando por los derivados. El Gobierno alemán no se ha pronunciado oficialmente sobre la dimisión de Seifert y Breuer pero, extraoficialmente, ha dicho tener 'un gran interés' en que la Bolsa no sea dividida.