Bruselas ofrece a España dos años más de fondo de cohesión
Cuatro años de arduas negociaciones ha necesitado España para convencer a los socios de la UE de su derecho a seguir recibiendo el Fondo de Cohesión (unos 1.800 millones de euros anuales) en el próximo presupuesto comunitario (2007-2013).
Luxemburgo, que preside la Unión durante este semestre, incluyó el viernes esa reivindicación en la propuesta de negociación de los presupuestos que presentará el lunes a los ministros de Asuntos Exteriores de la UE. La presidencia ofrece a España una prórroga del Fondo durante dos años, hasta el 31 de diciembre de 2008.
El Gobierno español consigue así por primera vez que se tome en cuenta su principal objetivo en esa negociación. La prórroga del Fondo de Cohesión permitiría a España amortiguar la drástica disminución de fondos europeos que resulta inevitable tras la ampliación de la UE.
Hasta ahora, ni la Comisión Europea ni la presidencia de la UE habían aceptado la posibilidad de esa prórroga, limitándose a ofrecer períodos transitorios para los fondos estructurales que reciben las regiones. Bruselas, en cambio, había ofrecido al Reino Unido una retirada paulatina del 'cheque británico' que anualmente reduce la aportación de ese país a las arcas comunitarias en más de 4.000 millones.
El giro de la presidencia luxemburguesa abre el camino a una ambiciosa negociación por parte española. El secretario de Estado de Asuntos Europeos, Alberto Navarro, ya calificó el viernes la oferta de 'muy positiva, pero insuficiente'.
Navarro calcula que la prórroga del Fondo de Cohesión hasta 2008 reportaría a España unos 3.500 millones de euros como máximo. La cifra, en su opinión, está 'todavía lejos de solucionar' la pérdida de 43.715 millones de euros que supondría para España la propuesta inicial de la Comisión.
Según esa propuesta, que descartaba cualquier fase transitoria para el Fondo de Cohesión, España recibiría de la UE entre 2006 y 2013 apenas 5.000 millones de euros una vez descontada su aportación a las arcas comunitarias, la cual se ha doblado en la última década. En el período anterior (2000-2006) el saldo favorable a España ascenderá a 48.715 millones.
La presidencia de la UE propone ahora 'una salida gradual del Fondo de Cohesión para los Estados que hubieran seguido recibiéndolo si el criterio de concesión fuera una renta nacional bruta por debajo del 90% de la media de una Unión de 15 miembros'. España es el único de los socios actuales que cumple esa condición, pues su renta bruta se ha disparado estadísticamente casi siete puntos hasta el 94,1% de la media de una Unión de 25 miembros. Una vez reconocido ese derecho, Madrid continuará con su batalla para reducir o eliminar el cheque británico, al que aporta más de 700 millones anuales.
Recorte en el techo presupuestario
El reconocimiento del derecho español a una prórroga del Fondo de Cohesión llega acompañado por el anuncio de una rebaja generalizada en todo el presupuesto para política regional de la UE.La presidencia luxemburguesa se pliega así a las exigencias de los principales contribuyentes (con Alemania y Francia a la cabeza) para limitar el gasto comunitario entre 2007 y 2013 al 1% de la renta nacional bruta de la UE. De la propuesta inicial de la Comisión Europea, que partía del 1,14%, se comienza a descender hacia el 1,07%. La UE se propone congelar el gasto en un nivel cercano al del presupuesto actual (2000-2006) a pesar de que han entrado 10 socios nuevos y en 2007 se incorporarán Rumania y Bulgaria. 'El recorte de fondos no es una buena noticia', reconocen fuentes españolas, aunque destacan que 'al ser equitativo' no perjudica tanto a España 'porque disminuye también su aportación'.Los Veinticinco intentarán cerrar el acuerdo definitivo sobre los presupuestos el próximo mes de junio, aunque parece probable un aplazamiento hasta junio de 2006 como mínimo.