Pesimismo europeo
Los últimos datos de confianza de la Unión Europea confirman el creciente grado de pesimismo de los empresarios del Viejo Continente. El indicador cayó en marzo por quinto mes consecutivo, y el declive es detectable prácticamente en todos los segmentos de actividad (industria, servicios, comercio), excepto la construcción. Como viene siendo habitual en los últimos meses, Alemania figura entre los países con mayor grado de pesimismo empresarial. Algo que no sorprende al ver los indicadores de actividad y de empleo del país (ayer mismo se anunció un nuevo récord en el número de parados).
Con este ambiente general y una inflación en la zona euro que se mantuvo estable en el 2,1% en febrero, el BCE probablemente hará caso a quienes reclaman que mantenga los tipos de interés hasta que repunte la economía. Algo que sería bueno para Alemania, pero no tanto para la inflacionista economía española.